Yessica Cruz, la joven de 23 años que tiene siete meses de embarazo y a quien una mujer habría intentado robarle su bebé luego de engañarla, darle una sustancia que la adormeciera y atacarla, habló con Diario del Huila sobre lo que ha sido este proceso y los temores que la siguen acechando.
DIARIO DEL HUILA, PRIMER PLANO
Por: Gustavo Patiño
Yessica Cruz se levanta en la mitad de la noche, cada noche. Cada vez, su corazón late con fuerza, como si quisiera salírsele del pecho. Aún lleva impresas en sus párpados las imágenes que le generan terror: esa mujer sobre ella, con un cuchillo en la mano, atacándola, intentando quitarle la vida para robar a su bebé.
Fue hace solo 13 días, pero, aunque las heridas ya comienzan a cicatrizar, el trauma sigue presente. El pasado lunes llegó a su casa, una humilde vivienda del barrio El Tesoro, en el oriente de la comuna Nueve de Neiva. Allí, pese a todas las dificultades sociales y económicas, encuentra el único lugar que le genera seguridad, no como en el ambiente frío y lúgubre del hospital, donde estuvo más de una semana siendo atendida por las lesiones que le dejó su agresora.
Yéssica Cruz, madre gestante agredida.
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Viva ‘de milagro’
“Estoy viva gracias a Dios”, dice mientras pone su mano derecha, también suturada, sobre la herida en el cuello. “El médico me dijo que, si hubiera sido un centímetro más a la izquierda o a la derecha, no habría podido sobrevivir”, asegura mientras muestra la herida que le causó la mujer luego de darle un café con alguna sustancia que la hizo dormir y que aún la aterroriza en sus pesadillas.
Fue un viernes, el 22 de agosto, cuando su agresora la contactó por la red social TikTok: “Queremos que seas la representante de un evento que vamos a hacer en Neiva para mamitas en gestación”, le dijo la mujer, quien se presentó como integrante de una fundación que apoyaba a madres gestantes. Tras varias postergaciones, llegó a su casa y compartió un rato con ella y su esposo, lo que le permitió ganarse su confianza. Luego quedaron de verse a las 6:30 de la mañana del día siguiente, frente al Centro Comercial San Pedro Plaza, donde supuestamente se realizaría el evento.
La joven recibió una puñalada en el cuello que le afectó traquea y laringe.
‘Abrí los ojos y estaba encima mío’
Después de que su esposo la dejara en motocicleta, la mujer le dijo a Yessica que el evento en realidad empezaba hasta las 9:30 a. m., por lo que debían ir al hotel donde se hospedaba para maquillarla y pintarle el vientre. “En esa situación cualquiera se hubiera confiado, porque ella nos mostró videos y fotos, como si realmente fuera de una fundación. Muchas personas critican, dicen que fui confiada, que eso no se hace, pero ella hablaba con mucha propiedad. Dijo que era abogada penalista y así se expresaba. Yo creo que en esa situación cualquiera se habría confiado”, señala Yessica.
Luego de tomar el café, comenzó a sentir sueño. Estaba recostada en una cama porque su agresora le dijo que le iba a pintar el vientre. “De repente sentí un dolor en el cuello. Abrí los ojos y la vi encima mío golpeándome. No sé cómo pude, pero metí las manos, la empecé a morder, no sé…”. No se explica de dónde sacó fuerzas, pero logró voltearse. “Yo pensaba mucho en mi bebé, porque quedé boca abajo, presionando mi barriga”, recuerda.
La joven madre consiguió arrebatarle el cuchillo a la mujer y salir hasta el balcón de la habitación a pedir auxilio. Sin embargo, como la delincuente la perseguía, intentó defenderse con el arma blanca que le había quitado.
Logró salir del lugar y, mientras sostenía la puerta, pedía ayuda a los transeúntes, quienes solo se limitaron a grabar la situación con sus celulares. Un vecino llamó a una ambulancia, pero ninguna de las que llegaron quiso atenderla, argumentando un tecnicismo: al ser una mujer embarazada debía trasladarla una ambulancia especializada. Solo hasta que su padre llegó y, enfurecido, exigió atención, una ambulancia la llevó al CAIMI y desde allí fue trasladada al Hospital Universitario de Neiva.
La mujer señalada de intentar extraerle la bebé a Yesica permanece en libertad
mientras avanza la investigación.
Más víctimas
Más allá de los terrores nocturnos, a Yessica le preocupa la impunidad de su caso. Tras el suceso, la Policía lo registró como una riña. Según ella, su versión de los hechos no fue tenida en cuenta. Pese a los esfuerzos de sus familiares, quienes lograron indagar en redes sociales sobre el pasado de la mujer, su agresora quedó en libertad días después, al ser dada de alta del hospital.
Yahir Aguilar, esposo de Yessica, logró contactarse con otra víctima en Mocoa. Los hechos habían sucedido de manera casi idéntica. Lo mismo denunció otra mujer en la capital del Putumayo.
Fue la insistencia de la familia la que movió a las autoridades. “Mi esposo siguió chuzando en la Fiscalía y antier me llamaron. Me dijeron que están recolectando todas las pruebas para seguir con el proceso. Están revisando las cámaras de seguridad del San Pedro Plaza, además de una tienda cercana al hotel donde sucedieron las cosas. Igualmente, mi esposo tiene el resto de pruebas”, asegura Yessica.
Aunque ahora se abrirá un proceso por intento de homicidio, en el que ella es la víctima, le preocupa que esto le pueda suceder a otra madre. “Conmigo fue el tercer intento, ya a la cuarta tal vez lo logre, y yo no quiero que ninguna mamita pase por lo mismo. Esto ha sido muy duro, muy difícil para mí. Que otra persona viva lo mismo es agobiante”, afirma.
Una luz de esperanza
Pese a todas las dificultades, a Yessica se le iluminan los ojos cuando habla de su bebé, Chloe Isabel, quien llegará al mundo en al menos dos meses. “Mi bebé es la que me ha dado la fuerza. Ella se mueve mucho cuando le hacen los controles, es una conexión súper increíble. Ella me da mucha fuerza”.
essica finaliza haciendo un llamado a todas las personas en redes sociales para que no les suceda lo que a ella le pasó: “No se confíen de lo que les digan en las redes. No todo es bueno. Uno nunca sabe lo que le pueda pasar”.
Luego de casi dos semanas hospitalizada, Yessica está en su casa recuperándose acompañada de su familia.
Denuncias de otros casos similares
Uno de los apartes más delicados de los testimonios conocidos por Diario del Huila corresponde a las declaraciones de Jhair Aguilar, quien aseguró que tras la publicación del caso recibieron denuncias de otras mujeres en diferentes partes del país que habrían sufrido intentos de engaño similares por parte de Vásquez Ortega.
“Nos han llegado documentos y videos de Putumayo y Nariño donde otras mujeres embarazadas denuncian que ella intentó hacer lo mismo. En Mocoa, por ejemplo, dos mujeres fueron contactadas bajo el mismo pretexto y una de ellas alcanzó a denunciar el caso. No entendemos cómo, teniendo estos antecedentes, la dejaron en libertad”, relató.
La familia afirma tener en su poder material probatorio que evidencia el patrón de conducta de la agresora, quien incluso habría estado privada de la libertad durante siete años por hurto calificado.
Con pancartas y velas, allegados pidieron en su momento que no haya impunidad en el caso de la joven gestante atacada.
Respuesta institucional
El personero de Neiva, Jerson Andrés Bastidas, confirmó que la Personería acompaña jurídicamente a la familia para que el caso sea reclasificado como intento de homicidio y no como “riña entre mujeres”:
“Hemos hecho presencia desde el primer momento, acompañando a la familia y orientando el proceso. Este caso no puede quedarse en una clasificación equivocada; debe investigarse con la seriedad que corresponde”.
La Secretaría de la Mujer de Neiva, en cabeza de Clara Eugenia Peña, también emitió un pronunciamiento rechazando el hecho y comprometiéndose a brindar apoyo psicosocial y jurídico a la víctima:
“Reiteramos nuestro rechazo absoluto a todo acto de violencia contra las mujeres. Solicitamos a las autoridades investigar con celeridad y tomar las medidas pertinentes contra la agresora. La institucionalidad está para acompañar a Yessica y a todas las mujeres que atraviesen situaciones de violencia de género”.
La versión de la Policía
El coronel Héctor Jairo Betancourt, comandante de la Policía Metropolitana de Neiva, explicó que la patrulla atendió el llamado de emergencia por una “riña entre dos femeninas” y que, al encontrar a ambas con lesiones, fueron capturadas y presentadas ante la Fiscalía.
“El reporte inicial que tenemos es de una riña. Ambas presentaban lesiones, una de ellas delicada en el cuello, y fueron dejadas a disposición de la autoridad competente. No tenemos información oficial sobre un intento de hurto de bebé”, señaló Betancourt.
Esta versión ha generado indignación en la familia y en la comunidad, quienes consideran que se trató de una minimización del hecho que favoreció la libertad de la agresora.
Antecedentes de la agresora
Las indagaciones posteriores revelan que Sara Lucía Vásquez Ortega ya había estado vinculada a procesos judiciales en el pasado. Según ciudadanos que reaccionaron en redes sociales, en 2018 habría participado en el hurto de electrodomésticos en un apartamento turístico en Bogotá y en el robo de un vehículo.
En Nariño y Putumayo también existen denuncias de madres gestantes que aseguran haber sido contactadas con promesas de ayuda bajo un modus operandi idéntico.
