Debido a la eliminación del subsidio ‘Mi Casa Ya’, muchos hogares colombianos frustraron su sueño de tener casa propia, por esto era un apoyo fundamental en este proceso, y que el gobierno actual lo erradicó. En Neiva las cifras de ventas de viviendas van en caída.
DIARIO DEL HUILA, HUILA
Por: Leidy Catalina Durán Vásquez
El sector de la construcción en Colombia atraviesa un momento de contrastes: mientras algunos subsectores muestran señales de recuperación o crecimiento, otros enfrentan caídas y dificultades estructurales que preocupan a gremios y analistas.
En el departamento del Huila el panorama no es nada alentador, de acuerdo con cifras entregadas por María Paula Dussán Oliveros, directora de Camacol, Huila actualmente el sector presenta una caída del 53% en lo corrido del año.
“Ya tenemos el informe que saca mensualmente Camacol para el mes de agosto en el tema de viviendas en términos generales seguimos en caída comparando el mes de agosto del 2025 con el mes de agosto del 2024 donde tuvimos una caída del 53%. Sin embargo, si hacemos el año corrido, tuvimos una caída del 25% aproximadamente”, sostuvo la directora de Camacol, Huila.
El sector constructor se ha visto altamente afectado por la eliminación del subsidio ‘Mi Casa Ya’, en Colombia, donde hubo una drástica caída en las ventas de vivienda en Colombia: en 2023 disminuyeron hasta en un 45 %. Camacol atribuye en buena medida esta caída al programa ‘Mi Casa Ya’.
De acuerdo con los expertos, cerca de 8 de cada 10 viviendas VIS se vendían con este subsidio. Su paralización quedó en evidencia desde octubre de 2024 y ha causado retrasos significativos en entregas.
“Para el tema de vivienda VIS que nos está afectando, tuvimos una caída del 37.5%. Sin embargo, para las viviendas NO VIS si tuvimos una leve mejoría aumentando en un 31%”, reveló Dussán Oliveros.
Por fortuna estas cifras desalentadoras hasta la fecha no han dado como resultado que constructoras cierren puertas debido a las malas ventas de viviendas, siguen sobreviviendo y generando estrategias para subsistir en medio de la crisis que padecen.
“Según la base de afiliados que nosotros tenemos acá en Camacol Huila, gracias a Dios ninguna de las constructoras en este momento ha cerrado sus puertas, todas le siguen apostando a invertir y a hacer sus proyectos de vivienda aquí en el departamento del Huila”, precisó la directora de Camacol, Huila.
Cada día menos subsidios
En ese sentido, Dussán Oliveros confirmó que esta situación tan desalentadora para el sector constructor se debe a la eliminación de este subsidio que de cierta medida ayudaba mucho a los colombianos a cumplir su sueño de tener casa propia.
“Para este semestre en el cierre de junio del 2025, únicamente el Huila ha contado con 29 subsidios comparándolos con los 1500 que para el año anterior a cierre de 30 de junio contaba el departamento”, expresó la funcionaria de Camacol.
Camacol dio a conocer que el inventario disponible, relacionada con la oferta servible para la venta se encuentra distribuida en un total de 68 proyectos en desarrollo de 32 empresas constructoras, con 1060 unidades de vivienda.
Del total de proyectos activos 56 se encuentran en Neiva, 10 en Pitalito y 1 en Garzón y 1 en el municipio de La Plata.
“Las iniciaciones que llevamos hasta el momento en el corrido del año, comparándolo con el 2024, tenemos 1060 unidades de vivienda que ya iniciaron construcción, que ya iniciaron obra acá en el departamento del Huila, muchos proyectos inician construcción, inician obras después de alcanzar su punto de equilibrio. Entonces, puede que de esas construcciones todavía quede en unas ofertas disponibles para aquellas personas que quieren comprar vivienda y que se las entreguen de una vez”, enfatizó Dussán Oliveros.

¿Qué son las viviendas VIS y NO VIS?
Las Viviendas de Interés Social (VIS) son aquellas viviendas destinadas a hogares de bajos y medianos ingresos. Su precio máximo está regulado por el Gobierno Nacional.
En 2025, el tope para una vivienda VIS es de 150 salarios mínimos mensuales legales vigentes (SMMLV). Y en ciudades con más de un millón de habitantes, el tope puede ser de 175 SMMLV.
Están diseñadas para facilitar el acceso a la propiedad a familias que no tienen vivienda propia.
Generalmente pueden acceder a subsidios estatales, como los subsidios de cajas de compensación o beneficios en tasas de interés. El máximo de 90 salarios mínimos mensuales vigentes son viviendas de interés prioritario. Las viviendas No VIS son aquellas cuyo valor supera el tope establecido para las VIS.
No tienen subsidios directos del Gobierno, aunque pueden beneficiarse de programas especiales (por ejemplo, cobertura en tasas de interés para ciertos segmentos).
Están dirigidas a personas o familias con mayor capacidad adquisitiva. Y pueden ser desde viviendas de estrato medio hasta proyectos de estrato alto o de lujo.
“Ya de ahí en adelante son todas las viviendas NO VIS, que son esas que tienen ya más acabados, son más exclusivas y se ajustan a las necesidades de los compradores”, indicó la directora de Camacol.
El panorama del sector constructor en 2025 en Colombia es mixto. Mientras la construcción de vivienda vive un momento difícil con disminuciones en lanzamientos e inicios, el subsector de infraestructura y obras civiles avanza con fuerza. La informalidad laboral y los altos costos representan barreras importantes, pero las oportunidades están presentes. El rumbo futuro dependerá en gran medida de políticas de vivienda accesible, estímulos para inversión en infraestructura, incentivos a la sostenibilidad, y mejorar la formalidad en el empleo.

Generación de empleo
El sector continúa siendo clave en la economía, pues aporta más del 12% del empleo en Neiva y ocupó el segundo lugar nacional en generación de empleo en mayo. Actualmente hay más de 3.000 unidades disponibles y 68 proyectos activos en 32 empresas.
Un informe detallado de la Cámara Colombiana de la Construcción en el departamento del Huila se pudo conocer, el comportamiento económico durante el primer semestre de este importante reglón económico.
La información reflejada, hace un llamado a fortalecer el trabajo conjunto entre sector público y privado, e impulsar estrategias que dinamicen el mercado y promuevan la vivienda digna y sostenible.
En Neiva, la construcción ocupa un total de 17 mil trabajadores, con lo cual el sector aporta el 12,2% del empleo total de la ciudad, casi el doble de la participación del empleo de la construcción a nivel nacional (6,5%). Así mismo, en mayo de 2025 la capital de Huila fue la segunda ciudad del país que más genero empleo en la construcción ocupando 3.900 trabajadores en comparación con mayo de 2024.
Ventas en caída
Llama la atención que las ventas de No VIS registraron un crecimiento del 22% pasando de 232 unidades en el primer semestre del año pasado, a 283 en el mismo periodo de 2025. Aun así, el resultado de ventas de la regional es el más bajo para un primer semestre desde el 2010, lo cual se explica en gran medida por las recientes decisiones de la política de vivienda nacional y, en particular, la suspensión de los procesos de postulación y preasignación de subsidios de ‘Mi Casa Ya’.
Entre 2021 y 2023 el departamento de Huila recibió en promedio 1.390 subsidios de ‘Mi Casa Ya’, manteniendo incluso una participación elevada en 2024, con 1.513 subsidios asignados, a pesar del recorte de cupos observado en el agregado nacional. Sin embargo, el 2025 el departamento ha recibido apenas 29 asignaciones de subsidios de ‘Mi Casa Ya’, lo cual, como se observa en las cifras, viene afectando de manera significativa el mercado VIS.
Según el ente cameral, como consecuencia de las reducciones en los ritmos de ventas, los inicios de obra se han visto afectados de manera notable. Con corte al primer semestre de 2025, las iniciaciones se contrajeron un 19,1%, registrando 682 unidades frente a las 843 viviendas iniciadas en el primer semestre de 2024.
Si bien la VIS presentó un comportamiento positivo, sumando un total de 463 unidades frente a las 430 iniciadas en el periodo de referencia de 2024, representado en el 7,7%. La No VIS, registró una contracción del 47,0% con la iniciación de 219 viviendas frente a las 413 registradas un año antes.
Desde Camacol se realiza un seguimiento especial a la dinámica de las iniciaciones en la medida que anticipan la demanda por insumos, crédito y la generación de empleo.

Panorama nacional 2025
Según el DANE, en los últimos doce meses a junio de 2025 se desembolsaron $26,6 billones para la financiación de vivienda, lo que representó un crecimiento real del 17,5% frente al mismo periodo del año anterior. Este dinamismo fue impulsado principalmente por el leasing habitacional, cuyos desembolsos aumentaron en un 44%, mientras que el crédito hipotecario registró un crecimiento del 13,7%. No obstante, el comportamiento en unidades fue distinto. En el mismo periodo se financiaron un total de 182.779 viviendas, lo que equivale a una reducción anual de 0,7%. El diagrama 1 detalla esta dinámica, diferenciando el comportamiento entre vivienda nueva y usada, así como por segmento de precio.
Para la vivienda nueva se registraron 132.446 desembolsos (72,5% del total), lo que supone una reducción de -6,7% anual. Esta caída se atribuye principalmente a la menor adquisición de VIS nueva en un contexto marcado por la suspensión del programa Mi Casa Ya. Esta situación ha limitado el acceso de los hogares de menores ingresos, lo cual se refleja en una caída del 26,5% en la financiación de VIS con subsidio: mientras que entre julio de 2023 y junio de 2024 se financiaron 73.138 unidades con apoyos gubernamentales a la compra de vivienda, en los últimos doce meses la cifra se redujo a 53.727.
Al mismo tiempo, se destacan tres tendencias en el mercado de financiación de vivienda en el país: 1) fortalecimiento del leasing habitacional que emerge como la modalidad de mayor expansión (37,2% en unidades). 2) recuperación en la financiación de vivienda No VIS, que para el caso de vivienda nueva crece un 11% con 31.801 unidades. Y, 3) dinamismo en los desembolsos de vivienda usada VIS y No VIS.
El análisis regional de los últimos doce meses muestra que las caídas en vivienda nueva VIS se han extendido en casi todo el país, con descensos superiores al 40% en el Magdalena, el Eje Cafetero, Huila, Norte de Santander y Nariño. Solo cuatro regiones presentaron crecimientos en este segmento, lo que evidencia el debilitamiento de su dinámica. En contraste, la No VIS exhibió un comportamiento más favorable, con aumentos en diez regiones, principalmente en Bogotá, Bolívar, Magdalena, Santander y Tolima. Más allá de este contraste, los resultados reflejan una recomposición de los mercados regionales, donde la pérdida de protagonismo de la VIS y el mayor peso de la No VIS generan dinámicas heterogéneas que modifican la estructura tradicional de la financiación en distintas zonas del país.
En conjunto, los resultados muestran que, aunque el mercado de financiación de vivienda mantiene un crecimiento en el valor de los desembolsos, se empieza a estancar del lado del número de unidades. Algunas modalidades de colocación como el leasing habitacional, segmento No VIS y usados destacan en su desempeño. No obstante, la financiación de VIS nueva, la más importante dentro del mercado hipotecario, se contrae debido a la menor disponibilidad de subsidios y al rezago en la política pública. Esta recomposición plantea un desafío estructural para el futuro del mercado inmobiliario, pues el dinamismo que hoy exhiben las cifras de desembolsos no necesariamente esta correlacionado con un mayor acceso por parte de los hogares de menores ingresos. Por ello, se hace cada vez más urgente contar con una política pública sólida y activa para la promoción de vivienda nueva, especialmente VIS, como instrumento clave para el cierre de brechas sociales y regionales.








