El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó un nuevo operativo de las Fuerzas Armadas norteamericanas en aguas internacionales del mar Caribe, que dejó como saldo tres personas muertas.
A través de su red Truth Social, el mandatario informó que se trató de un “ataque cinético letal” contra una embarcación señalada de transportar droga y de estar vinculada con una organización catalogada como terrorista. Según la Casa Blanca, la acción fue ejecutada bajo sus órdenes directas y tuvo como objetivo frenar el paso de narcóticos hacia territorio estadounidense.
De acuerdo con información de inteligencia, el barco navegaba por una ruta utilizada con frecuencia para el narcotráfico y transportaba sustancias ilícitas. El ataque, precisó Trump, se realizó de manera “concisa y contundente” y no dejó heridos entre las tropas estadounidenses.
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Este hecho se suma a una serie de operaciones similares en la región caribeña. Con esta acción, ya son cuatro los ataques de este tipo en lo que va del año, con un balance de 17 personas muertas. En ocasiones anteriores, las embarcaciones habían sido vinculadas a las costas de Venezuela, aunque en este caso no se especificó la procedencia del buque.
Desde Caracas, el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, reaccionó al despliegue militar estadounidense en el Caribe y lo calificó como “una guerra no declarada” y “una amenaza militar”, según expresó en declaraciones televisadas.
La estrategia de los llamados “ataques cinéticos letales” refleja una escalada en las acciones del Gobierno estadounidense contra el narcotráfico en la región, mientras se intensifica la presencia militar en aguas del Caribe bajo el mando del Comando Sur.
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