A 9 días de haberse iniciado el paro de los arroceros, no se vislumbra en el corto plazo una luz al final del túnel, que conduzca a terminar este tortuoso paro que tiene semiparalizada la dinámica económica de las regiones surcolombiana y de los de los departamentos productores de arroz, por los taponamientos que están generando en el bienestar de las familias. Las mesas de trabajo que se han instalado para buscar consensos que conduzcan a darle una salida a esta mayúscula problemática, encuentran soluciones por la intransigencia de los actores que se encuentran paralizando la libre circulación. Lo triste es que los productores, no hacen presencia en los sitios de concentración. Han contratado a un grupo minúsculo de jornaleros para que taponen las vías. Con la arrogancia y la soberbia y la vanidad que los caracteriza, siguen imponiendo a su antojo, a su libre albedrío que carros deben circular, estableciendo horarios cada seis horas para abrir solamente una hora.
Lo que desconocen estos lideres de las protestas sociales, es que varios bufetes de abogados están recibiendo poderes para demandarlos, por parte de empresarios que han sido afectados económicamente. Se destacan las actividades de hotelería y turismo, transporte, sector agropecuario y otros, que están siendo lesionados por la torpeza de impedir la libre circulación de vehículos y el flujo de turistas a disfrutar los atractivos que existen en estas regiones. Ya tienen plenamente identificados a los propietarios de los lotes donde se cultiva este grano. Y como si fuera poco, el anuncio de las 33 autoridades representativas de cada uno de los territorios ancestrales, pertenecientes a los 8 pueblos originarios que se encuentran afiliados a la Asociación de autoridades tradicionales del Consejo Regional Indígena del Huila (CRIHU), de realizar una minga de resistencia y supervivencia, en el sector de los Cauchos, con el fin de brindar acompañamiento y apoyo a los arroceros. Expresan que están en desacuerdo con la instauración de nuevos peajes, y básculas, la minería, a la extranjerización de la tierra, protección y liberación del territorio ancestral, entre otros temas que son imposibles de cumplir estas decisiones por parte del gobierno nacional, dada la coyuntura política y de orden público que está presentando el país. Estos anuncios son preocupantes porque se agudiza este conflicto que está padeciendo la sociedad colombiana.
Debemos destacar el liderazgo de la clase congresional del Huila, liderados por el Senador Carlos Julio González Villa, que han hecho serios cuestionamientos en la plenaria del Senado para que el gobierno nacional atiendan el clamor de este sector arrocero que tiene en vilo la estabilidad y el bienestar de las familias huilenses. Igualmente, las representantes Flora Perdomo, Julio Cesar Triana y Leyla Rincón, tienen previsto hoy la realización de un debate en la Comisión Quinta de la Cámara con las autoridades de sector agropecuario.
