El Huila cambia, pero no a la misma velocidad para todos. Mientras crecen los hogares unipersonales y la cobertura en salud parece avanzar, persisten las brechas en conectividad, acceso real a servicios y calidad de vida entre el campo y la ciudad.
DIARIO DEL HUILA, PANORAMA
Los resultados regionales de la Encuesta Nacional de Calidad de Vida (ENCV) 2024, publicados por el DANE, ofrecen una radiografía clara de las condiciones sociales de los hogares en el Huila. Aunque el departamento supera el promedio nacional en ciertos indicadores como afiliación al sistema de salud, persisten rezagos significativos en conectividad digital, tamaño del hogar y condiciones de acceso a servicios.
Menos personas por hogar, más hogares unipersonales
En el Huila, el promedio de personas por hogar es de 2,7, una cifra menor al promedio nacional (3,0) y que refleja la consolidación de hogares más pequeños. De hecho, el 25,2% de los hogares huilenses son unipersonales, superando el promedio nacional de 24,9%. Esta proporción es especialmente alta en áreas urbanas como Neiva, donde la combinación de envejecimiento poblacional, migración de jóvenes y cambios en las dinámicas familiares ha generado un crecimiento de hogares de una sola persona, muchos de ellos compuestos por adultos mayores.
Este fenómeno plantea retos urgentes en términos de cuidado, acceso a servicios domiciliarios, salud mental y aislamiento social, sobre todo para la población de la tercera edad.
Afiliación en salud alta, pero no suficiente
El Huila reporta un 90,7% de afiliación al sistema de salud, lo que lo ubica por encima del promedio nacional (88,9%). De este total, el 62,3% pertenece al régimen subsidiado, un indicador que evidencia la alta dependencia de la población a la financiación estatal de la salud.
Sin embargo, el acceso real a los servicios no siempre corresponde a la cobertura. En el análisis nacional, el 13,4% de los encuestados dijo no haber recibido atención cuando la necesitó. En el caso del Huila, si bien el boletín no da esta cifra desagregada, las quejas constantes de los ciudadanos en Neiva y municipios intermedios como Garzón y La Plata coinciden con esta problemática: demoras, falta de citas y cobertura médica insuficiente.
Acceso desigual a Internet y brecha digital rural
Uno de los mayores retos del Huila en 2024 sigue siendo la conectividad digital. El 61,4% de los hogares huilenses cuenta con acceso a Internet, por debajo del promedio nacional (66%). Esta cifra se agrava en zonas rurales, donde el acceso es incluso menor al 40%, lo que limita las posibilidades de educación virtual, teletrabajo y acceso a trámites digitales.
En municipios rurales como Íquira, Colombia, Elías y Tarqui, la carencia de infraestructura y cobertura impide una participación equitativa en la economía y la educación digital.
Trabajo de cuidado no remunerado: la carga femenina
El 37,2% de las mujeres en Colombia realiza trabajo no remunerado de cuidado frente a un 16,1% de los hombres. Aunque esta cifra no está desglosada para el Huila en el boletín, se estima que la carga de cuidado es mayor en zonas rurales del departamento, donde las mujeres suelen ser las principales cuidadoras de niños, adultos mayores y personas enfermas.
Esta desigualdad limita la participación femenina en el mercado laboral, especialmente en sectores informales y rurales, y refuerza la dependencia económica.
Percepción de calidad de vida: optimismo desigual
En términos generales, el 64,1% de los hogares del Huila considera buena su calidad de vida, una cifra similar al promedio nacional. Sin embargo, el optimismo varía según el territorio: mientras en Neiva hay mejores condiciones de vivienda, salud y conectividad, en municipios como Palestina, Santa María o Yaguará, las condiciones materiales son mucho más precarias.
Este contraste urbano-rural es uno de los ejes estructurales que continúa dividiendo el bienestar en el departamento.
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Ingreso insuficiente en uno de cada cinco hogares
El 21,5% de los hogares del Huila manifiesta no tener ingresos suficientes para cubrir sus necesidades básicas. Esta cifra está en línea con el promedio nacional, pero en zonas como el sur del departamento y en comunidades rurales, la situación puede ser más grave.
Este indicador indirectamente alerta sobre inseguridad alimentaria, falta de acceso a vivienda digna y dificultades para sostener el gasto en salud y educación, particularmente en hogares con jefatura femenina o en condición de informalidad laboral.
Conclusiones para el Huila
La ENCV 2024 confirma que el Huila enfrenta una transición social importante. Aunque algunos indicadores como afiliación en salud o percepción de calidad de vida están por encima del promedio nacional, otros como la brecha digital, la sobrecarga del cuidado y el aumento de hogares unipersonales evidencian problemáticas estructurales que deben ser atendidas con enfoque territorial.
Retos clave
- Acompañar a los hogares unipersonales, sobre todo los compuestos por adultos mayores.
- Convertir la afiliación en salud en atención real, especialmente en municipios intermedios y rurales.
- Cerrar la brecha digital que mantiene aisladas a miles de familias en el campo.
- Redistribuir el trabajo doméstico y de cuidado no remunerado.
- Fortalecer la capacidad de ingreso de los hogares más vulnerables.
Neiva, como capital, tiene el desafío de liderar políticas de inclusión que conecten a sus periferias urbanas y al resto del departamento con mejores oportunidades sociales.
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