La plenaria del Senado aprobó este martes el artículo 23 de la reforma laboral, que otorga carácter laboral al contrato de aprendizaje del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA).
La modificación implica que los más de 400.000 jóvenes aprendices que actualmente cursan formación técnica o tecnológica bajo este esquema accederán a condiciones laborales formales, incluyendo salario, afiliación al sistema de seguridad social, licencias de maternidad, derecho a sindicalización y negociación colectiva, conforme a lo estipulado por la Recomendación 208 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
El ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, celebró la decisión desde su cuenta oficial de X, resaltando que la medida dignifica el contrato de aprendizaje y fortalece el acceso al trabajo decente. “Histórico, el Senado aprobó el Artículo 23 de la Reforma Laboral, dignificando el contrato de aprendizaje del SENA. Ahora será con carácter laboral, mejores ingresos y derechos plenos para más de 400 mil jóvenes. Gana la juventud, gana el país, gana el trabajo digno», escribió el ministro.
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Sanguino recordó que la figura del contrato de aprendizaje había perdido su naturaleza laboral con la Ley 789 de 2002, y defendió el cambio como una forma de consolidar la política pública más eficaz de primer empleo que ha tenido el Estado colombiano.
Críticas desde la oposición
No obstante, la aprobación del artículo ha despertado fuertes críticas en sectores empresariales y en la oposición política. Una de las voces más duras fue la de la senadora María Fernanda Cabal, del partido Centro Democrático, quien calificó la decisión como un error que desconoce la realidad económica del país.
“Laboralizar el contrato de aprendizaje del SENA no es un triunfo para los jóvenes, es una trampa disfrazada de derecho”, afirmó Cabal, advirtiendo que el cambio podría incrementar hasta en un 76 % los costos para las empresas y desincentivar la contratación de aprendices. “El papel del SENA es el de una institución educativa, no una bolsa de empleo”, agregó.
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