Por: Oscar Eduardo Trujillo Cuenca
oscartrujillo79@gmail.com
“Una pausa para el alma en medio del ruido.”
Vivimos inmersos en un mundo que corre sin parar, donde la rutina, las exigencias del día a día y la inmediatez nos mantienen ocupados, pero no necesariamente enfocados y conectados con nuestro ser; en medio del ruido exterior, muchas veces olvidamos lo más sagrado, nuestro silencio interior. Por eso, la Semana Santa llega como una oportunidad invaluable para detenernos… y escucharnos desde el alma.
Esta época aparte de ser un tiempo litúrgico o de recogimiento religioso, también es un llamado a la interiorización, a revisar el rumbo de nuestras vidas, no desde la culpa, sino desde la conciencia; donde debemos preguntarnos y reflexionar sobre ¿Qué estamos cargando que ya no necesitamos? ¿Qué cosas estamos dejando de lado que deberíamos aceptar? ¿Qué heridas necesitamos mirar con amor para poder sanar?
La espiritualidad —más allá de credos— es ese espacio íntimo donde habita la verdad de lo que somos, ese lugar personal donde reside la esencia de nuestro ser. Esta semana mayor nos invita a regresar a ese espacio, a cultivar el silencio como territorio para la reflexión, el perdón, la gratitud y la reconciliación personal.
Es tiempo de soltar lo que nos pesa, de elegir lo que nos edifica, de abrazar lo que nos da paz; no tengamos miedo de la auto reflexión, de quedarnos a solas con nosotros mismos, es allí en donde encontraremos las respuestas que el ruido nos impide escuchar.
Tomémonos un momento para perdonar, agradecer lo vivido, pedir fuerzas y confiar en el que nos guía, regalémonos tiempo de elevar una oración, contemplar en silencio, caminar sin prisa o simplemente respirar con intención, porque a veces lo más necesario es detenerse y mirar hacia el interior.
Que esta Semana Santa, Semana de Reflexión no transcurra como una semana más de vacaciones y descanso, por el contrario, sea tiempo de renovación donde volvamos a lo simple, a lo auténtico, a lo que nos hace humanos, permitiéndonos la oportunidad de evolucionar.








