En una nueva fase de intervención humanitaria en el Cementerio Central Nuestra Señora del Carmen, en Pasto, la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) logró recuperar nueve cuerpos que, según las primeras hipótesis, corresponderían a víctimas del conflicto armado desaparecidas en los departamentos de Caquetá, Huila y Chocó.
DIARIO DEL HUILA, REGIONAL
La búsqueda de personas desaparecidas durante el conflicto armado en Colombia continúa arrojando resultados significativos. En el Cementerio Central Nuestra Señora del Carmen, en Pasto, Nariño, la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) culminó la tercera fase de intervención en el lugar con la recuperación de nueve cuerpos, los cuales podrían pertenecer a personas reportadas como desaparecidas en regiones como el Huila, Caquetá y Chocó.
La entidad informó que el hallazgo se produjo tras una exhaustiva labor de revisión y excavación en un área de aproximadamente tres hectáreas, donde fue necesario intervenir el terreno con socavones de más de dos metros de profundidad. Estas labores, realizadas con estrictos protocolos forenses y humanitarios, fueron adelantadas por el equipo especializado de la Regional Suroccidente de la UBPD, en conjunto con personal del Instituto Nacional de Medicina Legal, la Fiscalía General de la Nación, la Diócesis de Pasto y la administración del cementerio.
Los cuerpos, que se encontraban en zonas tanto de tierra como en bóvedas, fueron recuperados luego de una investigación humanitaria y extrajudicial que permitió identificar las áreas con mayor probabilidad de contener restos humanos relacionados con hechos del conflicto. La Unidad señaló que los procesos de identificación se adelantan a partir de análisis comparativos de necropsia y lesiones postmortem, contrastando la información con los registros del Instituto de Medicina Legal.
En los casos en los que se ha logrado orientar la identidad de las víctimas, los cuerpos fueron trasladados a Medicina Legal para avanzar en la confirmación plena y su posterior entrega digna a las familias. Para el Huila, este hallazgo representa una nueva esperanza para decenas de familias que han denunciado durante años la desaparición de sus seres queridos en zonas rurales afectadas por el conflicto armado, especialmente en municipios del norte y sur del departamento.
Una búsqueda que no se detiene
La UBPD anunció que en las próximas semanas realizará una nueva intervención en el sector de Aranda, también en Pasto, con el propósito de ubicar otros 21 cuerpos de personas desaparecidas. Estas acciones forman parte de una estrategia nacional de búsqueda y recuperación que pretende esclarecer el paradero de miles de personas dadas por desaparecidas en el marco de la guerra interna.
Los avances en Pasto se suman a otros hallazgos recientes en el departamento de Nariño. El pasado 15 de septiembre, la delegación del Gobierno Nacional en la Mesa para la Co-Construcción de Paz Territorial en esa región informó sobre el hallazgo de fosas comunes con 22 cuerpos en los municipios de Samaniego, Santa Cruz de Guachavéz y Cumbal. De acuerdo con el reporte oficial, 19 cuerpos fueron recuperados en Samaniego y Santa Cruz de Guachavéz, y 3 en Cumbal.
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Carlos Augusto Erazo, jefe de la delegación del Gobierno en esa mesa de diálogo y negociación con el grupo Comuneros del Sur —una disidencia que se apartó del ELN para acogerse a la vida civil—, explicó que los hallazgos son producto de los acuerdos alcanzados con las comunidades y del trabajo articulado con la UBPD.
“Estos hallazgos son fruto del compromiso asumido en el marco de esta Mesa y representan un paso trascendental en el camino hacia la verdad y la reparación para las familias que llevan décadas buscando a sus seres queridos”, expresó Erazo en un comunicado.
El eco en el Huila
En departamentos como el Huila, donde persisten reportes de desapariciones en municipios como Algeciras, La Plata y Pitalito, la información proveniente de Pasto genera expectativa. Según organizaciones de víctimas, varios de los casos documentados entre 1998 y 2005 podrían tener relación con las zonas donde se están realizando las exhumaciones, pues muchas personas habrían sido trasladadas fuera del departamento durante el conflicto.
La UBPD ha reiterado que la recuperación y entrega digna de cuerpos no solo busca identificar a las víctimas, sino también restituir la memoria y ofrecer un cierre simbólico a las familias que por años han vivido en la incertidumbre.
El proceso continúa con el apoyo del Protocolo V, implementado por la Unidad para garantizar condiciones humanitarias y de seguridad en las zonas donde se realizan las búsquedas.
Mientras se espera la confirmación de las identidades, el hallazgo en Pasto representa un nuevo avance en la lucha por la verdad y la reparación de las víctimas del conflicto armado colombiano, y renueva la esperanza de muchas familias huilenses que aún aguardan noticias de quienes un día desaparecieron sin dejar rastro.
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