La Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) inicia la intervención en el cementerio San Antonio de Padua en Pitalito, con el objetivo de recuperar los restos de 17 personas desaparecidas en el conflicto armado, marcando un paso esencial hacia la verdad y la reconciliación.
DIARIO DEL HUILA, HUILA
Entre el 2 y el 13 de diciembre de 2024, la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) ha comenzado una intervención en el cementerio San Antonio de Padua, conocido como el «cementerio antiguo», en el municipio de Pitalito, Huila. El objetivo principal es la recuperación de 17 cuerpos no identificados que podrían corresponder a personas dadas por desaparecidas en el contexto del conflicto armado.
Un paso hacia la verdad y la justicia
El proceso es liderado por un equipo interdisciplinario conformado por investigadoras humanitarias, antropólogas y criminalistas. Esta iniciativa representa un avance crucial en la misión de la UBPD de ofrecer respuestas a las familias que llevan años buscando a sus seres queridos.
“Estos 17 cuerpos corresponden a personas que fueron traídas al cementerio luego de fallecer en operaciones bélicas ocurridas en departamentos como Cauca y Huila entre los años 2002 y 2012”, explicó Diego Sevilla Cortés, coordinador de la UBPD en el Huila.
Hallazgos preliminares y próximos pasos
Según investigaciones humanitarias y extrajudiciales adelantadas por la Unidad de Búsqueda, en el cementerio San Antonio de Padua podrían reposar cerca de 90 cuerpos de personas no identificadas, vinculados a hechos ocurridos antes del 1 de diciembre de 2016 en el marco del conflicto armado. La UBPD planea continuar el proceso de recuperación durante el año 2025 para lograr la identificación y posterior entrega digna de los restos a las familias que buscan respuestas desde hace décadas.
Acto de memoria y convocatoria a la comunidad
En memoria de las personas desaparecidas, el miércoles 11 de diciembre a las 3:00 p.m. se realizará un acto conmemorativo en el cementerio San Antonio de Padua. Este evento, organizado por la Unidad de Búsqueda en conjunto con organizaciones sociales y familias buscadoras, tiene como propósito honrar a las víctimas, fortalecer el derecho a la verdad y aportar a la construcción de paz.
Se invita a la comunidad de Pitalito a participar de este acto y a unirse en el compromiso por el restablecimiento de los derechos y la no repetición.
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Atención a las familias buscadoras
Durante los días de prospección y recuperación de cuerpos, la UBPD estará disponible para recibir solicitudes de búsqueda o información que pueda contribuir a localizar personas desaparecidas. Diego Sevilla hizo un llamado a quienes tengan información relevante o crean que sus familiares podrían estar enterrados en el cementerio:
“Si tienen conocimiento o creen que sus familiares puedan estar en el cementerio San Antonio de Padua de Pitalito, pueden acercarse para presentar sus solicitudes o aportar información que nos permita avanzar en la búsqueda”, destacó.
Adicionalmente, quienes no puedan acercarse directamente pueden comunicarse con la UBPD a través de los siguientes canales:
– Línea celular en Huila: 3160174564
– Línea nacional gratuita: 018000-117175
Compromiso humanitario y confidencialidad
La Unidad de Búsqueda reitera su compromiso con un enfoque humanitario, extrajudicial y confidencial en todas sus acciones. Este proceso no solo busca recuperar cuerpos, sino también devolver la dignidad a las víctimas y ofrecer a sus familias una respuesta que les permita sanar y cerrar ciclos tras años de incertidumbre.
En su enfoque humanitario, la UBPD tiene en cuenta la necesidad de proteger la identidad de los familiares y garantizar que todas las acciones se lleven a cabo con sensibilidad y respeto. La confidencialidad es esencial para evitar la revictimización y asegurar que las familias puedan participar en el proceso sin temor o exposición.
La importancia de la memoria y la reconciliación
La intervención en el cementerio San Antonio de Padua no solo representa un avance en la identificación de cuerpos, sino que también resalta la importancia de preservar la memoria colectiva y apoyar a las comunidades afectadas por la violencia. La búsqueda de la verdad y la reparación es un proceso que debe involucrar a toda la sociedad, y estas acciones refuerzan el compromiso de construir un país donde los derechos humanos sean una prioridad y el pasado violento no se repita.
Los actos de memoria, como el programado para el 11 de diciembre, tienen un impacto profundo al ayudar a sanar las heridas abiertas, visibilizando el dolor de las víctimas y reafirmando la importancia de la paz y la justicia. La participación activa de la comunidad y el apoyo institucional son fundamentales para fortalecer el tejido social y avanzar hacia un futuro en el que la dignidad y los derechos de todos sean respetados.
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