Las autoridades están muy preocupadas por los nuevos estilos utilizados por las organizaciones narcoterroristas para convencer a los menores de edad para que se incorporen a sus filas, donde les prometen esta vida y la otra, pero cuando logran sus objetivos, empiezan a vivir el verdadero viacrucis por la forma irracional y salvaje como los tratan y que direccionan sus actuaciones para perpetrar actos criminales. Ya lo afirmábamos anteriormente en esta tribuna de opinión, que dentro de los múltiples delitos abominables que se han venido cometiendo desde hace más de seis décadas por parte de estas estructuras delincuenciales en el país, es el reclutamiento forzado de menores de edad, que han afectado a miles de familias colombianas, porque han perdido a sus hijos que han sido raptados por estos desadaptados sociales. Los han convertido en instrumentos de guerra y están siendo utilizados para fortalecer sus filas subversivas. Desde que se empezó la implementación del Acuerdo Renegociado de Paz nos ha permitido conocer el fondo verdadero de esta cruda realidad que ha venido soportando la sociedad colombiana. Y ahora, desde que asumió la presidencia de Gustavo Petro Urrego, nuevamente se han intensificado en algunas regiones del país, esta detestable práctica inhumana, que ha obligado a las familias a salir de los territorios donde operan estas organizaciones.
El Huila, no se sustrae de este flagelo. Durante el primer semestre de 2024, más de 1.000 estudiantes se han retirado de las aulas escolares en Neiva, sin causa alguna. Se pueden inferir que existe una correlación directa en menor proporción por el número de menores de edad que han sido reclutados por la guerrilla, que hace presencia en el departamento del Huila. La secretaria de Educación municipal ha impartido instrucciones a las instituciones educativas, porque deben informar inmediatamente a los padres de familia y a las autoridades, la ausencia sin justificación alguna. Entre las zonas donde existe alarma de reclutamiento de menores, se encuentran los corregimientos de Vegalarga, Fortalecillas y las comunas 8, 9,10, con el fin de evitar esta problemática se ha ampliado a todo el sector rural y a la comuna seis. Por esta causa la Defensoría, ha promovido la instalación de las Comisiones Intersectoriales para el ejercicio de las políticas públicas de prevención en el reclutamiento forzado niños, niñas y adolescentes.
Lo preocupante, es que los delincuentes hacen convocatorias masivas a través de las redes sociales, específicamente el Toc Tok para convencerlos que se incorporen a sus filas delincuenciales. Expertos vaticinan un aumento del reclutamiento forzado de menores, que es considerado una práctica execrable, con el fin de utilizarlos como escudos humanos. Frente a esta horrible conducta, hay que ser muy claros en que la responsabilidad recae por completo en los reclutadores. Debemos cuidarlos mucho.
