DIARIO DEL HUILA, JUDICIAL
La Policía Metropolitana de Neiva y las autoridades competentes confirmaron que Luis Herney Vargas Lizcano, quien perdió la vida el pasado sábado 20 de septiembre en el centro de reclusión temporal conocido como las bodegas de Alpina, no fue asesinado ni sufrió heridas con arma blanca, como se había señalado en las primeras versiones, sino que falleció a raíz de una complicación cardiaca.
El caso generó confusión desde un primer momento, pues el hallazgo del cuerpo levantó sospechas entre algunos internos y vecinos de la zona. Incluso se habló de una supuesta riña al interior del lugar. Sin embargo, tras la verificación forense y los reportes oficiales, se confirmó que la muerte fue consecuencia de una condición natural de salud, descartando cualquier tipo de agresión.
Antecedentes judiciales
Vargas Lizcano se encontraba recluido desde el pasado 6 de septiembre, cuando fue capturado en flagrancia en el barrio San Martín de Neiva. Según el reporte policial, ese día atacó a un perro en plena vía pública, causándole la muerte. La acción desató la indignación de la comunidad, que exigió justicia por el hecho.
El hombre fue dejado a disposición de la autoridad competente por el delito de lesiones que menoscaban gravemente la salud o integridad física de un animal, tipificado en la Ley 1774 de 2016, normativa que reconoce a los animales como seres sintientes y contempla sanciones penales contra el maltrato.
El caso no solo generó rechazo social, sino que también puso de relieve la importancia de aplicar con rigor las disposiciones de esta ley, que en los últimos años ha servido como herramienta para judicializar actos de crueldad contra los animales.

Aclaración de las autoridades
El anuncio de su muerte, ocurrido en el centro de reclusión, inicialmente vino acompañado de versiones imprecisas que señalaban una herida con arma blanca como causa del deceso. No obstante, las autoridades judiciales y de policía confirmaron que esas informaciones eran erróneas y preliminares, y que los exámenes realizados establecieron claramente que la causa fue una afección cardiaca súbita.
“Se trató de un deceso natural, producto de un problema cardiaco. No hay evidencia de violencia externa ni de riña con otros internos”, precisó una fuente oficial.








