El nombre de Baba Vanga, la mística y vidente búlgara fallecida en 1996, volvió a ocupar titulares y redes sociales ante la inminente aproximación del cometa interestelar 3I/Atlas, que alcanzará su punto más cercano a la Tierra el próximo 19 de diciembre.
El cuerpo celeste, que proviene de fuera del Sistema Solar, ha despertado tanto el interés científico como el esotérico, pues algunos de los seguidores de la llamada “Nostradamus de los Balcanes” aseguran que este fenómeno estaría relacionado con una de sus predicciones para 2025.
Un visitante interestelar bajo observación
El cometa 3I/Atlas es un objeto que, según los astrónomos, posee un núcleo de entre 10 y 30 kilómetros de diámetro y se desplaza a una velocidad de 68 kilómetros por segundo. De acuerdo con la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA), no representa peligro alguno para la Tierra, ya que su máxima aproximación será de 270 millones de kilómetros, una distancia completamente segura.
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Su perihelio —punto más cercano al Sol— se producirá cuando alcance los 210 millones de kilómetros, cerca de la órbita de Marte. En ese momento, mostrará su mayor brillo y podrá ser observado con telescopios profesionales, convirtiéndose en un acontecimiento astronómico destacado de fin de año.
El astrofísico Avi Loeb, de la Universidad de Harvard, ha planteado una hipótesis que ha generado debate en la comunidad científica: el cometa podría presentar características atípicas que lo diferencian de los objetos conocidos, sugiriendo incluso que podría tratarse de un fragmento artificial o de origen no humano.
La predicción que causa revuelo
Entre las muchas profecías que se le atribuyen a Baba Vanga figura una que, según sus seguidores, podría cumplirse con el paso del 3I/Atlas. La vidente habría dicho que “una nueva luz en el cielo aparecerá durante un gran evento deportivo y la gente de todo el mundo la verá”.
Los creyentes interpretan esta frase como una referencia al brillo que mostrará el cometa en diciembre y lo relacionan con otra de sus supuestas visiones para 2025: un “primer contacto con vida extraterrestre”.
Aunque no existe evidencia científica que vincule el paso del cometa con ninguna profecía, la coincidencia de fechas y el interés mediático han convertido el fenómeno astronómico en tema de conversación global, donde ciencia y misticismo vuelven a cruzar sus caminos. Le puede interesar: Vidente advierte sobre fuertes fenómenos naturales para noviembre









