El retraso climático en el Huila ha concentrado la cosecha cafetera de mitad de año en julio, con un avance cercano al 90 % en el norte, centro y occidente del departamento, generando un repunte significativo en la producción pese a las lluvias y bajas temperaturas que postergaron la recolección prevista para mayo y junio.
DIARIO DEL HUILA, ECONOMÍA
El sector cafetero del Huila ha experimentado un repunte significativo en julio, motivado por un inusual retraso en la cosecha del primer semestre del año. Factores climáticos como las lluvias constantes, las bajas temperaturas y las variaciones propias de la temporada postergaron la recolección prevista para los meses de mayo y junio, trasladando gran parte de la producción a los meses de julio y agosto. Este fenómeno ha generado un aumento en la actividad de las fincas y en la movilización del grano hacia los centros de acopio, beneficiando al mercado cafetero regional y nacional.
Según información oficial, en las zonas norte, centro y occidente del departamento, la cosecha de mitad de año registra un avance cercano al 90 %. Esto demuestra que, a pesar de las condiciones adversas, los caficultores han logrado recuperar terreno y concentrar la producción en un periodo más corto. Mientras tanto, en el sur del Huila, la recolección continúa y se incluyen las últimas etapas de la cosecha de la traviesa, que se espera esté próxima a concluir en los próximos días.
Ruber Bustos Ramírez, representante del Comité Directivo y Nacional de la Federación Nacional de Cafeteros, destacó que “la cosecha de mitad de año ya fue recogida en gran parte, pero su salida hacia los centros de acopio ha sido más lenta de lo habitual. El retraso en la entrega se atribuye principalmente a las condiciones climáticas que dificultaron el trabajo en las fincas. Esto ha generado que algunos datos de producción aún estén en consolidación”.
El representante gremial explicó que, aunque los datos finales del sur del departamento aún no están disponibles, se espera que el informe se consolide la próxima semana. Pese a los retrasos, los caficultores se muestran optimistas, ya que el incremento en la producción de julio y agosto podría compensar las pérdidas registradas durante el primer semestre del año.
Le puede interesar: Nueva ley elimina la obligación de pagar Soat a miles de conductores en Colombia
El fenómeno climático que postergó la cosecha tuvo impactos directos en la planificación de las fincas, ya que los productores debieron ajustar las jornadas de recolección y la logística de transporte hacia los centros de acopio. Según Bustos Ramírez, estas condiciones exigieron un esfuerzo adicional por parte de los caficultores, quienes debieron adaptarse a los cambios en los calendarios y a la incertidumbre generada por el clima.
A nivel regional, el Huila se mantiene como uno de los principales departamentos productores de café de Colombia, reconocido por la calidad de su grano y por la tradición cafetera que concentra a miles de familias en zonas rurales. La concentración de la cosecha en julio y agosto podría representar no solo un incremento en los volúmenes de producción, sino también una oportunidad para fortalecer la comercialización y la llegada del café a mercados nacionales e internacionales.
El retraso climático, aunque generó inconvenientes iniciales, también permitió una reprogramación de la actividad productiva, ofreciendo un panorama más ordenado en la entrega de sacos de café a los centros de acopio. Los expertos del sector aseguran que este fenómeno es una muestra de la resiliencia de los caficultores del Huila, quienes enfrentan retos climáticos y logísticos sin que se afecte de manera significativa la continuidad de la producción.
El gremio cafetero confía en que, una vez consolidada la información de las zonas sur y centro del departamento, los resultados finales del primer semestre reflejen un balance positivo. Además, anticipan que la recuperación de la producción en julio permitirá mantener la estabilidad del mercado, contribuyendo a que los precios del café se sostengan y a que los ingresos de las familias productoras se vean favorecidos.
De acuerdo con los reportes preliminares, la movilización del café hacia los centros de acopio ha seguido un ritmo más lento que en años anteriores, debido a la saturación de los caminos rurales por las lluvias y la necesidad de revisar la calidad del grano antes de su venta. Esta situación también ha incentivado la implementación de estrategias logísticas adicionales, como el uso de transporte especializado y la coordinación directa entre los productores y las cooperativas locales.
En conclusión, el retraso climático que afectó la cosecha del primer semestre en el Huila ha generado un escenario atípico, pero con resultados alentadores para el sector cafetero. La concentración de la producción en julio y agosto evidencia la capacidad de adaptación de los caficultores y apunta a un balance final positivo en términos de volumen y calidad del grano. Las expectativas del gremio son optimistas, y se espera que la producción de esta temporada consolide al Huila como un referente nacional en café de alta calidad.
Puede leer: Exportaciones del agro colombiano crecieron 35% en junio 2025
