La Procuraduría General de la Nación decidió extender por tres meses más la suspensión provisional de la patrullera Érika Judith Pérez Romero, involucrada en un caso de presunto uso excesivo de la fuerza ocurrido en enero pasado en Bogotá.
La funcionaria es señalada de haber golpeado con su bastón institucional (tonfa) al joven Juan Sebastián Nova durante un procedimiento policial en el sector del humedal Juan Amarillo.
El Ministerio Público justificó la medida argumentando que la prórroga busca garantizar el esclarecimiento de los hechos relacionados con un posible abuso de autoridad, así como la preservación del debido proceso en la etapa disciplinaria. Según el comunicado emitido, la Procuraduría Primera Distrital de Instrucción calificó de manera provisional la conducta de la uniformada como gravísima, a título de dolo.
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El hecho ocurrió cuando Juan Sebastián Nova grababa con su teléfono celular el procedimiento policial en el que estaba siendo registrado. En las imágenes, que circularon posteriormente en redes sociales, se observa cómo la patrullera Pérez Romero golpea al joven con su bastón, causándole lesiones que requirieron atención médica y una incapacidad de diez días.
Además del proceso disciplinario que adelanta la Procuraduría, la patrullera enfrenta una investigación en la Justicia Penal Militar, donde fue imputada por violencia física. En ese marco, la Procuraduría Distrital de Juzgamiento deberá determinar si Pérez Romero desconoció los derechos del ciudadano, y si incurrió en la vulneración de los principios de legalidad y proporcionalidad al ejercer fuerza contra el joven.
Por ahora, la funcionaria permanece suspendida de sus funciones mientras avanzan las investigaciones, tanto en el ámbito disciplinario como penal.
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