En un fallo de segunda instancia, la Procuraduría General de la Nación confirmó la sanción de destitución e inhabilidad por ocho años contra Pedro Páramo Quintero, exrector de la Institución Educativa Pacarní, ubicada en el municipio de Tesalia, Huila.
La decisión se basó en la participación del exfuncionario en actividades vinculadas a partidos y movimientos políticos mientras ejercía su cargo.
Según el ente de control, el disciplinado publicó de manera voluntaria en sus redes sociales fotografías y contenidos que comprometieron la neutralidad política exigida por su posición como directivo de una institución educativa pública. La Procuraduría consideró que esta conducta afectó la imparcialidad en el ejercicio de sus funciones.
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En su decisión, el órgano disciplinario señaló que, si bien los servidores públicos tienen derecho a la libertad de expresión, esta no es absoluta y se encuentra sujeta a límites, especialmente en lo relacionado con la participación política activa. “(…) Aunque el rector tenía el derecho a expresar su opinión, tenía que ser consciente de las limitaciones impuestas por su posición pública, especialmente en lo que respecta a la protección de la neutralidad institucional”, indicó la Procuraduría.
La entidad agregó que el exrector incurrió en una falta gravísima cometida a título de culpa gravísima, al considerar que actuó con una negligencia evidente frente a las responsabilidades inherentes a su cargo. Asimismo, desestimó el argumento del disciplinado sobre el derecho a la intimidad, al señalar que sus acciones fueron realizadas en espacios públicos como las redes sociales.
Con esta decisión, el exrector queda inhabilitado para ejercer cargos públicos durante un periodo de ocho años.
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