Debido al paro arrocero que completa 10 días en el departamento, estaría afectando el suministro de combustible en el sur del país, actualmente hay estaciones que reportan retrasos y escasez. Luz Mila Moyano, directora de la Agremiación Combussur expresa su preocupación por el desabastecimiento que puede haber en los próximos días.
DIARIO DEL HUILA, HUILA
Por: Leidy Catalina Durán Vásquez
El paro arrocero que ya completa 10 días en el departamento del Huila también ha afectado el suministro de combustible en el sur del país, en la actualidad hay estaciones que reportan retrasos y escasez.
“Efectivamente el paro de los arroceros nos ha afectado como a todas las comunidades, como a todos los sectores económicos. Nosotros hemos hecho un análisis desde el día 3, desde que se inició lo del paro de los arroceros, y nosotros en este momento hemos visto disminuidas las ventas, más de un 38% en el diésel, y de un 39% en las ventas de la gasolina”, sostuvo Luz Mila Moyano, directora de la Agremiación Combussur.
Asimismo, Moyano se mostró preocupada por el desabastecimiento que esta situación puede generar en el departamento del Huila, debido a que los camiones cisterna, encargados de transportar el combustible, deben esperar en los bloqueos, lo que ha duplicado el tiempo de transporte de un día a dos.
Esta situación no solo afecta la movilidad y logística de distribución, sino que también pone en riesgo el suministro para el sur del país, donde la disponibilidad de gasolina y ACPM depende directamente del flujo constante desde Neiva.
“Está llegando el momento en que los inventarios se están agotando, se están acabando en los municipios del departamento del Huila, y la preocupación es que realmente ya se desabastezcan algunos municipios, nosotros tenemos un inventario de aproximadamente 4 días, 5 días máximo solamente, lo que sucede es que en esta semana anterior algunos vehículos si alcanzaron a pasar y algunas estaciones de servicio se han traído o llevado combustible hacia la zona. Esa es una de las grandes ventajas, pero ya en estos momentos que están bloqueando mucho más tiempo el ingreso o la salida de los vehículos, ahí sí estamos muy preocupados, porque ahí sí estamos viendo que nos estamos desabasteciendo”, indicó Moyano.
Si los bloqueos continúan y se vuelven permanentes, el abastecimiento de combustible en municipios como Pitalito, La Plata, Garzón y otros del sur del Huila, así como en Caquetá y Putumayo, podría verse gravemente afectado en los próximos días.
Como lo decía la directora de la Agremiación Combussur, las estaciones de servicio en estas regiones suelen contar con inventarios que les permiten operar durante tres o cuatro días sin recibir nuevos suministros; sin embargo, la imposibilidad de transportar el combustible por vías alternas agrava la situación.
“Esa es la preocupación mayor que tenemos, el desabastecimiento, los carros de bomberos, los carros de la policía, las ambulancias, todos estos están siendo afectados en estos momentos. Preocupante, porque un vehículo que viajaba al sur del departamento al otro día se regresaba, ahora se está demorando 2, 3 días para poder regresar y volver a hacer otro viaje, precisamente por el bloqueo que hay en estas dos zonas”, sostuvo.
Sin afectación en el precio
Moyano afirmó que, aunque se registre afectación en la movilidad; aún no se realiza aumento en el precio del combustible; pero si hay un impacto en el costo del traslado para los comerciantes.
“En estos momentos no se ha presentado ningún incremento, sin embargo, nosotros los minoristas podemos asumir lo que llamamos una pérdida o dejar de ganar en nuestro margen de rentabilidad para transferírselo al consumidor final. La verdad que la situación nuestra es supremamente complicada, primero por el desabastecimiento, que es un producto esencial en la economía de las regiones, y segundo, pues obviamente que nosotros estamos disminuyendo margen de rentabilidad. Es que hay que entender que la situación implica que no solo se empiece a desabastecer el departamento del Huila y los departamentos afectados por este tema del paro arrocero de combustible, sino que también se deja que los camiones o los vehículos que se transportan por las vías, pues automáticamente todo el mundo se paralice”, manifestó Moyano.
De acuerdo con la directora, sí se ha visto disminuido la compra en la planta mayoritaria y se han visto también disminuido las compras en las estaciones de servicio.
“Para nosotros poder transportar de acá de la planta del Venado, hacia el sur del departamento del Huila, tenemos que hacer solamente de acá un reporte que hemos perdido más o menos un 32% del consumo que teníamos anteriormente, o sea, hace ocho días. Y la otra figura, o la otra parte, es el consumo dentro de los municipios. En eso también se ha visto disminuido porque, lo que está comentando en este momento, los vehículos sienten temor en tener que salir a hacer algunas de sus actividades, entonces, también se ve disminuida la venta en las estaciones de servicio”, argumentó.
Posible desabastecimiento
Además de afectar el transporte de combustible, los bloqueos han impactado la economía local, ya que el retraso en el suministro puede generar alzas en los precios y afectar sectores productivos que dependen del combustible para sus actividades diarias; una crisis prolongada podría repercutir en pérdidas económicas significativas y en la paralización de diversas actividades.
“Lo preocupante es el pánico que se puede generar, de darse una especulación en el sentido que las personas entren en pánico y salgan todos a tanquear y ya para el día siguiente no haya combustible, pero si sabemos que se podría dar un desabastecimiento”, puntualizó Luz Mila.
Las estaciones en los departamentos de Huila, Caquetá y Putumayo son las más vulnerables a esta situación. La afectación no se mide solo por la cantidad de vehículos afectados, sino por la falta de combustible que impacta a la comunidad en general.
El desbloqueo de las vías y el transporte de combustible en tiempos más cortos es crucial para mitigar estos problemas. Actualmente, los inventarios de combustible de las estaciones están comenzando a agotarse.
Es importante señalar que, aunque los inventarios iniciales podían abastecer por un tiempo, la situación se está volviendo crítica. Si los bloqueos continúan, el suministro podría verse gravemente afectado, lo que pondría en riesgo la comercialización de combustible en el sur de Colombia.
