El municipio huilense refuerza su seguridad tras el hallazgo de mensajes pintados por presuntos integrantes del Frente Hernando González Acosta.
DIARIO DEL HUILA, HUILA
Una creciente preocupación se ha apoderado de los habitantes del municipio de La Plata, en el occidente del Huila, luego del hallazgo de tres grafitis en fachadas de viviendas y establecimientos comerciales, con mensajes alusivos al Frente Hernando González Acosta, una de las estructuras de las disidencias de las Farc. Aunque no se han presentado hechos de violencia directa ni panfletos amenazantes, la presencia de estas señales en pleno casco urbano ha generado alarma y zozobra en la comunidad.
Los grafitis, descubiertos en la mañana tras una aparente jornada de vandalismo ocurrida durante la madrugada, han sido interpretados como una muestra simbólica de presencia y poder por parte del grupo armado ilegal. Esta acción, aparentemente menor, representa para los residentes una amenaza latente y un recuerdo de los tiempos más duros del conflicto armado.
Según indicó el Capitán Nixon Montes, comandante del Distrito 6 de Policía en La Plata, “conocimos de tres grafitis que habrían realizado personas en tres lugares diferentes del municipio, haciendo alusión a un grupo armado”. Ante estos hechos, las autoridades han reforzado su presencia en sectores estratégicos, intensificando patrullajes para verificar si se trata de miembros activos del grupo armado o si son acciones aisladas destinadas únicamente a sembrar miedo.
“En el casco urbano del municipio se han venido reforzando las acciones y medidas de seguridad con el fin de llevar tranquilidad a la ciudadanía; así mismo informamos que sobre cualquier dato de interés sobre el particular nos puedan hacer llegar la información a la línea 123, garantizando absoluta reserva”, agregó el Capitán Montes.
No obstante, la incertidumbre permanece. La aparición de estos grafitis ocurre en un contexto nacional en el que algunas estructuras disidentes de las Farc han venido rearmándose, pese a los esfuerzos del Estado por mantener los acuerdos de paz firmados en 2016. En ese sentido, las autoridades no descartan que esta acción pueda estar relacionada con una posible reorganización del Frente Hernando González Acosta, una facción que fue golpeada duramente por la fuerza pública hace apenas dos meses.
“El Frente Hernando González Acosta es una estructura criminal que hace dos meses fue desmantelada por nuestras fuerzas armadas, y ahora intentan mostrar que pueden reactivarse. Eso es lo que han hecho con esta ola propagandística de grafitis y anuncios en algunas casas de este importante municipio”, advirtió el gobernador del Huila, Rodrigo Villalba.
Tras la firma del Acuerdo de Paz en 2016, la mayoría de los antiguos combatientes de las Farc se desmovilizaron y comenzaron su proceso de reincorporación a la vida civil. Sin embargo, algunas disidencias optaron por retomar las armas y actualmente operan en zonas de difícil acceso en departamentos como el Cauca, Caquetá, Putumayo y Huila. Su estrategia ha incluido el uso de la propaganda como método para reafirmar control territorial, con presencia armada, amenazas, extorsión, vallas y grafitis.
Los residentes de La Plata, aunque acostumbrados a los retos que impone la seguridad en zonas rurales, no esperaban este tipo de manifestaciones en el corazón del municipio. La situación ha generado llamados de urgencia a las autoridades locales y nacionales para garantizar la seguridad y la tranquilidad de la población.
Mientras avanzan las investigaciones, los habitantes siguen atentos a las acciones de la fuerza pública y exigen que se mantengan las condiciones de paz y estabilidad que han venido construyendo durante los últimos años. “No podemos retroceder, necesitamos vivir sin miedo, con garantías para nuestras familias”, expresó una comerciante del centro del municipio que pidió no ser identificada.
Por ahora, La Plata permanece en estado de alerta, con un despliegue policial reforzado y bajo observación de inteligencia militar, a la espera de determinar si este incidente representa una amenaza mayor o si se trata de una estrategia propagandística de bajo impacto.








