El presidente Gustavo Petro hizo un llamado directo a los integrantes del ELN para que abandonen las armas y se sumen a la construcción de un país en paz.
El jefe de Estado señaló que Colombia debe abrirse camino hacia una transformación profunda que permita consolidar una sociedad más digna y sin violencia. “Colombia tiene que ser grande, pararse sobre los dos pies, tener un pueblo que no agache la cabeza nunca, que no se arrodille ante nadie”, afirmó frente a la comunidad que asistió al evento. Según dijo, el país puede ser ejemplo mundial si logra demostrar cómo se construye la paz, la producción y la riqueza colectiva.
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Petro resaltó el concepto de “amor eficaz” como fundamento social para dejar atrás las armas. Recordó que este principio fue formulado por Camilo Torres Restrepo, sacerdote y figura histórica que se vinculó a la lucha armada, cuyo cuerpo continúa desaparecido. “Yo creo que a mucha gente que anda con armas por ahí se le olvidó el amor y la eficacia del amor”, señaló el mandatario.
Durante su discurso, insistió en que la violencia ligada a economías ilegales ha dejado una profunda huella de dolor en el país, especialmente en regiones como el Catatumbo. “Mantenernos en economías perseguidas, que dejan a nuestros niños y niñas muertos, y a nuestros viejos, y la sangre corre por el surco, no vale, no va más”, manifestó.
El presidente reiteró que la propuesta de su Gobierno es construir un Catatumbo próspero, seguro y en manos de su gente trabajadora, tanto del campo como de la ciudad. “Podemos construir un Catatumbo grande y en paz”, afirmó, reforzando su invitación al desarme como camino para un futuro de convivencia y desarrollo regional.
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