La Organización Mundial de la Salud (OMS) investiga más de 50 muertes ocurridas en la República Democrática del Congo (RDC) debido a una enfermedad de origen desconocido y rápida progresión. Mientras las pruebas han descartado la presencia de los virus del Ébola y de Marburgo, las autoridades exploran posibles causas como una intoxicación química o un brote de meningitis bacteriana.
DIARIO DEL HUILA, SALUD
La Organización Mundial de la Salud (OMS) está llevando a cabo una investigación sobre más de 50 muertes ocurridas en la República Democrática del Congo (RDC) en el mes de febrero, debido a una enfermedad desconocida de rápida progresión. Según los reportes iniciales, el tiempo promedio entre la aparición de los síntomas y el fallecimiento de los afectados es de solo un día.
Investigación en curso
El pasado 9 de febrero, las autoridades sanitarias congoleñas informaron sobre 24 muertes comunitarias inexplicables en una aldea al oeste del país. Hasta el 25 de febrero, el número total de muertes ascendió a 53, de las cuales 50 se concentraron en la misma localidad. La mayoría de las víctimas eran adolescentes y adultos jóvenes del sexo masculino.
Los análisis preliminares han descartado la presencia de los virus del Ébola y de Marburgo en las muestras analizadas. Por ello, la OMS está explorando dos hipótesis principales: una posible intoxicación química, ya sea accidental o deliberada, o un brote de meningitis bacteriana de rápida evolución. Mientras tanto, las pruebas de laboratorio y la investigación en terreno continúan.
Sintomatología y evaluación epidemiológica
Los síntomas registrados en los pacientes incluyen fiebre, escalofríos, dolor de cabeza, dolor muscular, dolor abdominal, diarrea, sudoración, mareos, dificultad para respirar, agitación y otros signos de afectación sistémica. Según los informes, en el grupo inicial de afectados, el tiempo medio desde la aparición de los síntomas hasta la muerte fue de un día, con un promedio general de dos días.
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Ante la gravedad del brote, las autoridades locales establecieron un protocolo de vigilancia de casos sospechosos. La definición de un caso sospechoso incluyó a cualquier persona con fiebre acompañada de al menos otro síntoma. Hasta el 25 de febrero, se habían identificado 1.318 pacientes que cumplían con estos criterios. Sin embargo, la OMS ha advertido que esta amplia definición dificulta la interpretación de tendencias y sugiere que muchos de estos casos podrían estar relacionados con enfermedades febriles comunes en la región. En este sentido, la mitad de las pruebas realizadas a los pacientes sospechosos dieron positivo para malaria.
Posibles antecedentes y análisis de riesgo
La OMS también ha vinculado esta investigación con otro evento reciente en la misma provincia, donde entre el 10 y el 27 de enero se documentaron 12 casos y 8 muertes. En este brote anterior, las pruebas de laboratorio descartaron nuevamente la presencia de los virus del Ébola y de Marburgo, sugiriendo en cambio que la malaria grave podría haber sido la causa.
Pese a que ambas comunidades están en la misma provincia, se encuentran separadas por unos 175 kilómetros de difícil acceso, con bosques densos e infraestructura vial limitada. Hasta el momento, la investigación epidemiológica no ha encontrado pruebas concluyentes que relacionen ambos eventos.
Con la información disponible, la OMS ha clasificado el riesgo para la salud pública local como moderado, ya que la causa del brote aún no ha sido determinada y las investigaciones continúan. No obstante, la organización ha evaluado el riesgo a nivel nacional e internacional como bajo, debido a la naturaleza localizada del evento y a la disminución aparente de su incidencia.
Las autoridades sanitarias y la OMS continúan trabajando en el análisis de laboratorio y en la investigación epidemiológica para esclarecer la causa de estas muertes. Mientras tanto, se insta a la población de la zona afectada a seguir las recomendaciones de salud pública y a informar de inmediato cualquier síntoma sospechoso para facilitar el control del brote.
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