Por: Sergio Trujillo
Diputado Asamblea del Huila
Una de las herramientas más poderosas con las que hoy cuenta el Estado para llevar desarrollo a las regiones más olvidadas y vulnerables del país es el mecanismo de Obras por Impuestos (OXI). Este modelo permite que las empresas privadas inviertan parte de sus impuestos en proyectos sociales y de infraestructura que impactan directamente la vida de las comunidades.
En lugar de pagar sus tributos únicamente en dinero al fisco nacional, las empresas pueden destinar esos recursos al financiamiento de obras previamente aprobadas por el gobierno. Es decir, las empresas aportan al país, pero viendo en tiempo real los efectos positivos de su contribución. Y el Huila es hoy un ejemplo destacado del buen uso de este mecanismo.
Gracias a la gestión del gobernador Rodrigo Villalba, y al compromiso de empresas como Enel y Hocol, nuestro departamento ha recibido inversiones millonarias bajo esta modalidad. En el caso de Enel, la inversión de más de $7.700 millones en dotaciones deportivas, culturales y musicales para 35 instituciones educativas en municipios ZOMAC como Algeciras, Acevedo, Isnos, Tello, Colombia, Baraya y Hobo ha beneficiado a más de 22.800 estudiantes. Esta es una apuesta clara por la educación, la inclusión y el fortalecimiento de la identidad cultural de nuestra niñez y juventud
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Pero el impacto no termina allí. En días recientes se anunció una inversión de $22.491 millones por parte de Enel para la rehabilitación de 5,3 kilómetros de vía desde la Ruta 45 hasta el centro poblado Guacamayas, en Algeciras. Esta obra, de enorme importancia para la conectividad y el desarrollo agrícola del oriente del Huila, beneficiará a más de 26.500 personas, mejorará la movilidad regional y fortalecerá la economía campesina
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Estos dos ejemplos muestran que cuando el sector privado y el público se articulan con visión y compromiso, el resultado es progreso con sentido social. Las Obras por Impuestos son más que una estrategia fiscal: son una expresión concreta de responsabilidad social empresarial.
Desde la Asamblea Departamental del Huila, hago un llamado a las grandes y medianas empresas que operan en nuestro territorio para que se acojan a este mecanismo. No solo cumplen con su deber tributario, sino que dejan huella en las comunidades, construyen reputación positiva y aportan al cierre de brechas históricas.
Hoy más que nunca, el desarrollo del Huila necesita de todos. Sigamos demostrando que cuando se suman voluntades, se logran grandes transformaciones. Porque solo así avanzamos En Equipo por el Huila.
