Si algo le cuestionamos desde el concejo a la administración del antecesor de CASAGUA, fue el mal manejo de las finanzas, la debilidad del proceso financiero del municipio (Presupuesto, Recaudo, Contabilidad, y de Tesorería). Como concejal lideré muchos debates de control político, por la excesiva contratación de personal, la creación de cargos, la demora en el pago de las cuentas, y el porcentaje de gastos versus los ingresos, que a larga genero la pérdida de categoría para Neiva. Aunque aclaro que esa pérdida de categoría no afecta las transferencias de recursos del orden nacional.
Y por esa debilidad en el manejo técnico de las finanzas (gimnasia presupuestal), muchos decidieron confiar en Germán Casagua eligiéndolo como alcalde, incluyéndome, pues al conocer el estado de las finanzas el municipio, tendría una propuesta clara para recuperar y mejorar el estado financiero del municipio. Sin embargo, hoy, un año y tres meses después del inicio de su gestión, las finanzas no mejoran y la incertidumbre reina.
Y todo porque el plan de saneamiento financiero, que diseñaron para recuperar las finanzas del municipio no da sus frutos. Empezando por la muy sonada reestructuración administrativa, que fusiono dependencias, que conllevo a la reducción de la planta de personal. Según el Alcalde en sus declaraciones el año pasado, esta reducción debería generar un ahorro anual entre 8.000 y 15.000 millones de pesos al año. Sin embargo, hoy la realidad es otra. Mientras en el año 2023, los gastos de personal fueron de 69.702 millones de pesos, en 2024 fueron de 72.304 pesos, es decir, casi 3.000 millones de pesos más, por lo que no existió ningún ahorro. Es decir, la burocracia que tanto le criticó Casagua a Gorky, no solo se mantuvo, sino que además aumentó, a pesar que incluso disminuyó los cargos, lo que quiere decir que incrementó los salarios y que menos personas ganaron mucho más que en el anterior gobierno.
Y eso además generó otro problema y es que aumentaron las cuentas por pagar para este año. Mientras el año pasado, las cuentas pendientes por pagar que dejó su antecesor, ascendían a 54.000 millones de pesos, este año sumaron 55.000 millones de pesos. Esto es 23.000 millones de pesos que quedaron pendientes de las cuentas a contratistas del año 2023, y 32.000 millones que sumaron las pendientes por el actual alcalde del año pasado, a más de 1.400 personas. Aunque hace poco el secretario de Hacienda dijo que, de ese último monto, ya pagaron 19.000 millones de pesos.
Lo cierto es que inquieta y preocupa esta situación, porque si el año pasado debían 54.000 millones y pagaron cerca de 30.000 millones, pese al buen comportamiento del recaudo por esfuerzos económicos realizados por los neivanos, porque se cumplió la meta de recaudo, ¿qué les hace pensar que este año puedan pagar los 55.000 millones de pesos que aún están pendientes?
Pero lo que es peor, en qué se diferencia la administración de su antecesor y la de Casagua, si siguen las demoras en los pagos de las cuentas, si los contratistas que suministraron bienes y servicios, se ven obligados a seguir vendiendo las cuentas a agiotistas, para subsistir, que le cobran el 8 o el 10%, lo que afecta la economía de esas familias. Creo que la situación no mejora, sino que además sigue empeorando. El alcalde tampoco demuestra que en lo administrativo, dé resultados.
Además, la incertidumbre en los neivanos, acrecentado por otros problemas coyunturales en materia de seguridad, de conservación y mantenimiento de vías, con escándalos en la contratación, cuestionamientos de ineficiencia, ineptitud y nadie responde, lo que acrecienta una desconfianza en lo que pueda suceder en el futuro.
A 15 meses del inicio de su gobierno, aún no visualizamos soluciones a los problemas sociales planteados y plasmados en el PDT, pero se evidencia la ejecución presupuestal del gasto de más de 875 mil millones de pesos y sin ningún logro por mostrar.
Lo que es peor es que haya dependencias, donde sus secretarios se delaten en su ineficiencia cuando ejecutaron menos del 50% de los recursos apropiados. Por ejemplo, Gestión del Riesgo, solo ejecutó el 41% de los 3.077 millones apropiados el año pasado. Un año que estuvo cargado por incendios, inundaciones y otras emergencias.
Lo mismo pasa con Medio Ambiente y Desarrollo Rural. Solo ejecutó 6.900 millones de 22.600 lo que representa un 30% de estos recursos. He ahí la explicación, por ejemplo, de por qué la ciudad tiene totalmente abandonado el ornato, por qué las zonas verdes están sin mantenimiento y la cara de la ciudad cada vez más abandonada. ¡Y qué curioso! Hace unos años eso mismo le criticaba Casagua al ex secretario de medio Ambiente, por tener sucia y sin ornato la ciudad, teniendo recursos para ejecutar.
Y con un 16% de las dependencias menos eficaces aparece el SETP, que a pesar que tuvo 3.600 millones de pesos en presupuesto, solo invirtió 600 millones.
Secretaria de Gobierno, con tanto problema de seguridad y espacio público que tenemos, dejó sin ejecutar 3.000 millones de pesos en la vigencia anterior, que representan el 33%.
Así que en la ineficiencia administrativa, encontramos también la razón de por qué el municipio no avanza y las finanzas no mejoran, y por qué, a pesar que los ciudadanos siguen pagando sus impuestos, ahora con sobretasa de inseguridad, la Neiva que tanto le criticaba Casagua a su antecesor, sigue siendo igual o peor.
