Por: Mario Solano
Un gran ejemplo a seguir, después de observar el desastre que ha vivido La Guajira con el robo de los recursos destinados a mejorar las condiciones de vida de sus habitantes, surgió el grupo liderado por el del Dr. Luis Carlos Sarmiento Gutiérrez bajo el nombre de «Misión La Guajira». Este proyecto demostró en tan solo un año que es posible lograr avances significativos, donde el sector publico, no pudo. Hasta la fecha, Misión La Guajira, ha impactado positivamente a más de 81 comunidades y a más de 20,000 personas. Entre los logros más destacados está la provisión de energía eléctrica, agua potable e internet en estas comunidades. Contrasta esto con el esfuerzo del gobierno encargado de la seguridad alimentaria, que ha llegado a apenas 10 comunidades. Hace un año, estos servicios básicos eran inexistentes en pleno siglo XXI. Este contraste evidencia cómo la falta de gestión publica, ha perpetuado las condiciones de precariedad en la región. Es alarmante cómo nos preocupamos por las crisis humanitarias en otros países, mientras ignoramos que, en nuestro propio territorio hay compatriotas que carecen de lo más esencial como agua potable y comida. Sin estas bases, no hay posibilidad de hablar de educación o salud. En este contexto, la iniciativa privada está dando ejemplo claro de que sí se pueden hacer las cosas bien. Este demuestra que los gobiernos han fracasado en cumplir con sus deberes, muchas veces por motivos como, la corrupción y la burocracia ineficiente. La realidad es que el sector privado es más eficiente que el sector público; Un argumento importante ahora con la reforma a la salud, que busca estatizar este servicio. El gobierno debería enfocarse en acompañar, vigilar y controlar, pero no en monopolizar la prestación de servicios esenciales como la salud. La experiencia es amplia, demostrando que cuando los recursos son gestionados de manera eficiente y transparente, los resultados son visibles y sostenibles. Sería ideal replicar este modelo en otras regiones del país. Que bueno ver Proyectos como «Misión Huila», «Misión Cundinamarca», Misión Putumayo, y muchas otras mas, haciendo una gran Misión Colombia, liderados por empresas privadas con apoyo de los gobiernos locales y Nacional. Esto permitiría reducir las desigualdades. Este tipo de iniciativas públicos privados, son las que tenemos que promover y transformar realidades que parecían inmutables. Feliz Navidad, un abrazo a todos los lectores.








