El ministro de Defensa Nacional, Pedro Sánchez, confirmó la existencia de un “plan pistola” ejecutado por diferentes grupos armados ilegales contra miembros de la Fuerza Pública en distintas regiones del país.
La declaración se da tras una serie de ataques recientes que han cobrado la vida de uniformados tanto de la Policía como de las Fuerzas Militares.
“Ese ‘plan pistola’ está, y está por todos los grupos armados”, afirmó el ministro al referirse a los hechos ocurridos durante Semana Santa, cuando seis policías fueron asesinados en diferentes departamentos del país. Según el reporte oficial, los crímenes incluyen tres homicidios en Antioquia, uno en Cartagena y dos en el departamento del Cauca, donde los uniformados fueron víctimas de atentados mientras cumplían labores de patrullaje.
Uno de los casos más recientes involucra a un miembro del Ejército asesinado en Norte de Santander mientras brindaba seguridad a una comunidad afectada por la presencia del Clan del Golfo. Las autoridades también han confirmado la persistencia de atentados selectivos en esta zona del país.
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Llamado a la ciudadanía y estrategia territorial
Ante el incremento de la violencia, el ministro Sánchez hizo un llamado a la colaboración ciudadana para “quitarle el oxígeno” a los grupos ilegales. Subrayó que la transformación social del Cauca —uno de los departamentos más afectados por la presencia de organizaciones armadas— contempla una estrategia basada en un 70 % de inversión estatal en infraestructura, salud, educación y empleo, y un 30 % de fortalecimiento de la Fuerza Pública.
“El objetivo es intervenir integralmente el territorio caucano, no solo desde el punto de vista militar, sino con acciones que atiendan las necesidades estructurales de la población”, explicó el jefe de la cartera de Defensa.
Recompensa por información
Por su parte, el director general de la Policía Nacional, brigadier general Carlos Fernando Triana Beltrán, condenó los recientes homicidios y calificó los hechos como asesinatos “viles y cobardes” que han enlutado a familias de servidores públicos que cumplían con su deber constitucional.
Triana anunció una recompensa de hasta 100 millones de pesos por información que permita identificar, localizar y capturar a los responsables de los atentados contra los uniformados.
“Hay dolor por la muerte y el asesinato de nuestros seis policías (…) pero también el compromiso de actuar con contundencia para dar con los autores materiales e intelectuales de estos crímenes”, indicó el alto oficial.
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