En Neiva y Pitalito se realizaron jornadas masivas de entrega de cartas de indemnización económica, como parte de la estrategia nacional “Del Escritorio al Territorio” liderada por la Unidad para las Víctimas.
DIARIO DEL HUILA, REGIONAL
En el departamento del Huila, 514 personas sobrevivientes del conflicto armado recibieron sus cartas de indemnización económica por un valor total de $5.927 millones, en el marco de dos jornadas de reparación integral realizadas en los municipios de Neiva y Pitalito. Las actividades fueron lideradas por la Unidad para las Víctimas con el apoyo de las Mesas de Participación de Víctimas y las alcaldías locales, como parte de la estrategia nacional denominada “Del Escritorio al Territorio”, que busca acercar la institucionalidad a las comunidades afectadas por la violencia.
Estas jornadas representaron un paso más en el proceso de reparación individual y colectiva a las víctimas de la violencia en el Huila, un departamento que ha sufrido de manera directa las consecuencias del conflicto armado. Los beneficiarios pertenecen a distintos municipios del norte y sur del territorio, y además de recibir las cartas de indemnización, pudieron acceder a espacios de orientación sobre el uso adecuado de los recursos. La idea, según la Unidad, es garantizar que este apoyo económico se convierta en una herramienta real para el mejoramiento de la calidad de vida de los hogares.
Presencia institucional en los territorios
La entrega fue encabezada por Karol Ortigoza, subdirectora de Gestión Social y Humanitaria de la Unidad para las Víctimas, quien destacó el impacto positivo que genera el programa en la reconstrucción de confianza entre la ciudadanía y el Estado.
“Esta entrega masiva de cartas de indemnización hace parte de la estrategia que lidera el director general, Adith Rafael Romero, ‘Del Escritorio al Territorio’. Hacemos presencia y ofrecemos cercanía a la población víctima del conflicto armado de Pitalito y el sur del Huila, devolviendo la confianza en las instituciones, en la Unidad para las Víctimas, a todos los huilenses y a estas familias que han sido afectadas por el conflicto”, afirmó la funcionaria.
El acto contó también con la participación de representantes de las Mesas de Participación de Víctimas. En Pitalito, Miguel Rojas, coordinador de la Mesa Municipal, valoró la importancia de que estas jornadas lleguen de manera descentralizada a los municipios.
“La Unidad se ha venido descentralizando y esto hace que no nos sintamos solos, que nos sintamos reconocidos. Esperamos que mes a mes continúen estas jornadas”, manifestó Rojas.
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Un proceso que avanza en todo el departamento
La más reciente entrega de 514 cartas se suma a las 112 realizadas la semana anterior en el municipio de Garzón, donde también se beneficiaron víctimas residentes en la zona centro del Huila. Con estas acciones, la Unidad para las Víctimas reitera su compromiso con la descentralización de la atención y la reparación integral, evitando que los ciudadanos deban desplazarse a grandes ciudades para adelantar sus trámites.
El enfoque de la estrategia “Del Escritorio al Territorio” es precisamente llegar a los lugares donde se encuentran las comunidades afectadas por la guerra, ofreciendo de primera mano garantías de atención, acompañamiento psicosocial y asesoría institucional.
Más allá del reconocimiento económico
Si bien la indemnización económica representa un apoyo fundamental para las víctimas, la Unidad ha reiterado que este recurso debe ser utilizado de forma estratégica para generar condiciones de vida más dignas. Durante las jornadas, los asistentes recibieron información sobre programas de emprendimiento, educación, vivienda y proyectos productivos, que pueden complementar el impacto de la reparación económica.
El objetivo es que las familias logren consolidar iniciativas sostenibles en el tiempo, más allá de un auxilio inmediato. De este modo, las indemnizaciones se convierten en una oportunidad para la reconstrucción de proyectos de vida interrumpidos por la violencia.
Compromiso con la reparación integral
El proceso de reparación en el Huila sigue siendo un reto, dada la magnitud de la población víctima en el departamento. Sin embargo, la entrega de más de $5.900 millones en indemnizaciones constituye un avance en la atención prioritaria que el Estado busca garantizar.
La Unidad para las Víctimas ha reiterado que el compromiso no se limita a los pagos económicos, sino a un acompañamiento integral que fortalezca el tejido social en los municipios golpeados por la guerra. Para la entidad, cada entrega representa también un acto simbólico de reconocimiento, dignificación y restitución de derechos.
Las jornadas en Neiva y Pitalito fueron recibidas con optimismo por parte de los beneficiarios y sus familias, quienes resaltaron que más allá del alivio económico, este proceso es una muestra de que sus historias y sufrimientos no han sido olvidados.
Con este tipo de acciones, el Huila continúa avanzando en su proceso de sanación y reconstrucción tras décadas de conflicto, en un camino que aún requiere esfuerzos sostenidos, pero que poco a poco genera confianza en las instituciones y esperanza en las comunidades.
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