En el marco del Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer, autoridades departamentales y nacionales dan a conocer cifras preocupantes de casos de violencia contras las mujeres, donde se presentan altos casos en municipios pequeños.
DIARIO DEL HUILA, HUILA
Por: Leidy Catalina Durán Vásquez
En el Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer, que se conmemora hoy 25 de noviembre, el departamento del Huila enfrenta uno de los panoramas más inquietantes de los últimos años en materia de violencia de género. Las cifras reveladas por la Secretaría de la Mujer, Familia e Inclusión Social muestran un aumento sostenido de casos y un deterioro profundo en las garantías de seguridad, protección y derechos para las mujeres huilenses.
Entre enero y octubre de este año, el departamento ha registrado 4.131 casos de violencia de género, una cifra que, según la secretaria Natalia Alejandra Ortiz Valderrama, obliga a redoblar esfuerzos y fortalecer las rutas de atención.
La funcionaria explicó que la violencia física y sexual continúan siendo las más recurrentes donde la violencia física reporta 1.922 casos y la violencia sexual 1.122 casos.
Estas cifras no solo representan números, sino historias de dolor, vulneraciones profundas y afectaciones psicológicas y emocionales que transforman la vida de miles de mujeres y sus familias.
A estos hechos se suman 388 casos de violencia psicológica, una forma de agresión que, aunque menos visible, genera secuelas devastadoras. Y 710 reportes de negligencia y abandono, que afectan, sobre todo, a mujeres en condiciones de dependencia o vulnerabilidad.
Uno de los datos más alarmantes expuestos por Ortiz es que el 90% de los agresores hacen parte del núcleo familiar de la víctima. En la mayoría de los casos se trata de esposos, parejas sentimentales, tíos o abuelos.
Las poblaciones más afectadas son: mujeres gestantes: 125 casos, mujeres con discapacidad: 44 casos, esto evidencia que la violencia se ensaña especialmente con quienes menos posibilidades tienen de defenderse o de buscar apoyo.
Municipios con más violencia
Aunque Neiva concentra la mayor cantidad de reportes con 1.700 casos, la violencia de género se ha extendido por todo el departamento: Pitalito con 812 casos, Garzón con 335 y La Plata con 294.
Pero lo que más preocupa a las autoridades es el aumento significativo en municipios que históricamente tenían registros bajos, como: San Agustín con 291 casos, Campoalegre con 233 y Acevedo con 223.
Estos nuevos picos muestran que la violencia está llegando a zonas rurales y municipios intermedios, donde la presencia institucional muchas veces es limitada y las mujeres tienen barreras para denunciar.
La secretaria recordó que el departamento cuenta con rutas claras para atender casos de violencia. Las mujeres pueden comunicarse a la Línea 155, disponible en todo el país o a la Línea de vida del Huila: 321 907 3439, la cual está disponible 24/7.
Además, dependiendo del municipio, pueden acudir a: Comisarías de Familia, Estaciones de Policía, Hospitales o ESE municipales, Equipos de atención psicosocial y jurídica.
Ortiz explicó que la Secretaría hace parte del mecanismo articulador, una estrategia que permite coordinar esfuerzos entre las instituciones para garantizar atención rápida, acompañamiento jurídico, apoyo psicológico y activación de medidas de protección.
Un componente central del trabajo de la Secretaría es la autonomía económica de las mujeres. La funcionaria resaltó que muchas víctimas no denuncian por dependencia financiera o por miedo a perder el sustento de sus hijos.
Para enfrentar esta situación, la entidad trabaja en programas de formación y capacitación, creación y fortalecimiento de unidades productivas, procesos de orientación laboral y acompañamiento para proyectos de emprendimiento.
“Sabemos que la independencia financiera es vital. Estamos formando mujeres, apoyando sus emprendimientos y dándoles herramientas para que puedan salir adelante sin depender de su agresor”, señaló Ortiz.

Un llamado a denunciar
La secretaria hizo un llamado directo a todas las mujeres del departamento: “Denuncien. No les dé miedo. Nosotros estamos para apoyarlas, para acompañarlas y para activar todas las rutas necesarias. No están solas”.
Ortiz enfatizó que la prevención y la denuncia temprana pueden salvar vidas y evitar que los casos escalen a hechos de mayor gravedad.
Velatón y homenaje
Como parte de la conmemoración, este 25 de noviembre se realizará una velatón a las 6 de la tarde en la Plazoleta de la Gobernación del Huila.
Durante el acto, se encenderán sirios en memoria de las mujeres violentadas y se realizará la firma del Pacto por la No Violencia contra la Mujer. Un sacerdote acompañará la ceremonia con una bendición simbólica, buscando enviar un mensaje de esperanza y solidaridad a las víctimas y sus familias.
La Secretaría reiteró que la lucha contra la violencia hacia la mujer no puede limitarse a una fecha conmemorativa. Se requiere una acción continua desde las instituciones, la comunidad y las familias.
“Este debe ser un compromiso diario. Cada caso que se previene es una vida que se protege”, concluyó Ortiz.
Panorama en Neiva
De acuerdo con Clara Eugenia Peña, secretaria de la Mujer, el ultimo perfil epidemiológico, hasta octubre de 2025 se han reportado 1.524 casos de violencia basada en género en Neiva. La mayoría de estos casos corresponden a agresiones físicas, pues las víctimas acuden al sector salud tras ser golpeadas. Las agresiones sexuales y psicológicas también son frecuentes, evidenciando la diversidad de formas en que se vulneran los derechos de las mujeres.
A su vez, indicó que la administración municipal trabaja en campañas de sensibilización para desnaturalizar la violencia.
“Estamos desarrollando estrategias como Centros Comerciales Libres de Violencia y actividades de concienciación para empoderar a las mujeres y a la comunidad, es importante involucrar a todos los sectores”, explicó la funcionaria.
El Observatorio de Género y Violencia, que se implementará en diciembre, permitirá consolidar cifras del sector salud, justicia y otras instituciones, unificando la información para tomar decisiones más precisas.
“El objetivo es que los medios y la ciudadanía se unan para visibilizar y prevenir la violencia de género, que afecta a toda la sociedad”, precisó la secretaria.
Además, Peña reveló que las víctimas pueden acudir al sector salud, a comisarías de familia o a la Casa Empoderadora ubicada en el Parque de los Niños en Neiva, donde reciben acompañamiento jurídico, psicológico y social.

Violencia contra las mujeres en política
En ese contexto, Colombia desarrolló el estudio “3000 voces por la democracia: Experiencias de candidatas en Colombia para erradicar la violencia contra las mujeres en política” una investigación que se realizó con el apoyo de la Embajada de Suecia, en articulación con la Registraduría Nacional del Estado Civil y la Defensoría del Pueblo, en el marco de la estrategia multiactor “Más Mujeres, Más Democracia”
La investigación constituye el estudio más representativo para Colombia sobre violencia contra mujeres en política, evidenciando a través de estadísticas los obstáculos y barreras enfrentadas por las mujeres candidatas de las más recientes elecciones del país en 2023.
El estudio hace parte de una iniciativa global de ONU Mujeres que está en marcha en 4 países de Latinoamérica, incluido Colombia. En Colombia se realizó con el apoyo de la Embajada de Suecia, en articulación con la Registraduría Nacional del Estado Civil y la Defensoría del Pueblo, en el marco de la estrategia multiactor “Más Mujeres, Más Democracia: soluciones para ellas, avance para Colombia”, impulsada por la Mesa de Género de la Cooperación Internacional, entre otros socios.
Desarrollado mediante una metodología mixta (cuantitativa y cualitativa) que incluyó encuestas, entrevistas y grupos focales, el estudio recopila las voces de 3.027 mujeres de seis regiones de Colombia, tomando en cuenta cuatro objetivos: identificar las experiencias de participación política de mujeres en las elecciones territoriales; caracterizar las formas y manifestaciones de violencia en su contra en la actividad política; analizar la carga de cuidado como barrera para la participación en política y generar recomendaciones para mejorar la comprensión, el monitoreo, la prevención y la respuesta a la violencia contra las mujeres en la política en Colombia.
Actualmente, las mujeres representan más del 30% de los escaños en el Congreso de la República y a nivel local el 24,5% de los cargos territoriales. El informe evidencia que, a pesar de los avances normativos que promueven la participación y la igualdad de género en la política (Ley 1475 de 2011, la Ley 2424 de 2024), así como la prevención y la sanción de la violencia contra las mujeres en política, (Ley 2453 de 2025) la participación de las mujeres en cargos políticos y administrativos aún presenta brechas de representación importantes.
Los datos del estudio muestran que la violencia contra mujeres en política es generalizada, pues durante la campaña electoral, 3 de cada 4 (76,7%) candidatas a las elecciones territoriales de 2023 vivieron algún tipo de violencia en las actividades presenciales en el ejercicio de su liderazgo, como visitas a barrios, veredas, asambleas y reuniones; ¿la razón? el simple hecho de ser mujeres. El 61.3% de las candidatas reportó haber experimentado una o más situaciones de violencia, principalmente a través de comentarios despectivos (insultantes) enfocados en la capacidad de las mujeres para ejercer la política.
Las manifestaciones de violencia impactaron significativamente a las mujeres; de hecho, 7 de cada 10 (72.4%) reportaron haber sufrido una o más situaciones de violencia psicológica, lo que incluyó comentarios despectivos por su participación en política. Además, 2 de cada 5 (40.6%) fueron víctimas de violencia económica (como el robo, la destrucción o la vandalización de materiales o de la sede de campaña).
Asimismo, 1 de cada 4 (25.4%) experimentó una o más situaciones de violencia sexual, que abarcó desde recibir comentarios o sugerencias sexuales y la solicitud de favores sexuales a cambio de apoyo político o financiero, hasta tener que tocar, abrazar o besar en contra de su voluntad. Por último, el 4.6% fue víctima de violencia física (como patadas, bofetadas, sacudidas fuertes o agresiones con objetos o armas). En este contexto, cabe destacar que las candidatas a alcaldías fueron el objetivo principal de las manifestaciones de violencia de índole psicológica (36.8%) y sexual (31.4%).
De igual manera, el 41,2% reportó violencia en redes sociales u otros medios digitales, lo que pudo afectar sus posibilidades de ser electas, pues 3 de cada 11 (27,3%) evitaron debates y exposición digital por miedo a la violencia digital, afectando sus posibilidades de ganar.
En todos los casos, las candidatas más afectadas pertenecen a poblaciones negras, afrodescendientes, raizal, palenquera (NARP), con discapacidad, lesbianas, en etapa de adultez y vejez o con mayor nivel educativo.
Una de cada tres candidatas avaladas por un partido político sufrió algún tipo de violencia por parte de sus propios miembros. El principal hecho reportado fue la sugerencia de que su postulación se debía únicamente al cumplimiento de la cuota de género (24.5%), seguido de comentarios despectivos sobre su capacidad como mujer para desempeñarse en política. Los principales agresores fueron otros candidatos o candidatas (42.9%) y líderes del partido (29.0%), siendo en su mayoría hombres (81.5%).
Frente a las acciones iniciadas por las candidatas ante la ocurrencia de hechos de violencia, solo el 8.0% presentó una queja formal o una denuncia. De las mujeres que presentaron denuncia o queja se reporta que en el 24.9% hubo alguna sanción, acción o resolución del caso.
“La violencia contra las mujeres en política no es un hecho aislado: debilita liderazgos, limita la democracia y disuade a muchas de participar en la vida pública. Este informe aporta evidencia clave para orientar políticas públicas efectivas, fortalecer la protección a las candidatas y avanzar hacia una democracia paritaria donde ninguna mujer tenga que elegir entre participar o sentirse segura”, aseguró María Inés Salamanca, representante país a.i de ONU Mujeres.








