El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó este lunes el despliegue de 4,5 millones de milicianos en todo el territorio nacional, tras el anuncio de Estados Unidos de elevar a 50 millones de dólares la recompensa por información que lleve a su captura.
El mandatario enmarcó la medida dentro de lo que denominó un “plan de paz”, en el que convocó a la Milicia Nacional Bolivariana —componente de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB)— a mantenerse “preparada, activada y armada”.
“Esta semana voy a activar un plan especial para garantizar la cobertura con más de 4,5 millones de milicianos en todo el territorio nacional”, expresó durante una alocución televisada.
Aunque no detalló en qué regiones se concentrará el despliegue, Maduro aseguró que la intención es establecer presencia de las milicias “en todos los sectores del país”.
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Contexto internacional
El anuncio del presidente venezolano coincide con nuevas acciones de Washington. Medios estadounidenses, entre ellos CNN, revelaron que el Pentágono movilizó a 4.000 efectivos, principalmente infantes de Marina, hacia aguas de América Latina y el Caribe, con el propósito de reforzar operaciones contra los carteles del narcotráfico. Las medidas incluyen también el despliegue de aviones, barcos y sistemas lanzamisiles.
En paralelo, la fiscal general de EE. UU., Pam Bondi, declaró la semana pasada que se habían confiscado alrededor de 700 millones de dólares en bienes presuntamente vinculados a Maduro, a quien las autoridades norteamericanas acusan de narcotráfico.
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