El ministro de Defensa, Pedro Arnulfo Sánchez, lideró un Consejo de Seguridad extraordinario para analizar la crítica situación de seguridad en los departamentos de Huila y Caquetá, donde la extorsión y la presencia de grupos insurgentes han generado zozobra en la población. La reunión contó con la participación de la cúpula militar, el gobernador del Huila, Rodrigo Villalba Mosquera, y el gobernador del Caquetá, con el objetivo de diseñar estrategias conjuntas para enfrentar estos flagelos.
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Durante el consejo, se destacó la necesidad de una acción coordinada entre las fuerzas militares y la comunidad para desarticular las estructuras criminales que operan en la región. El ministro de Defensa hizo un llamado urgente a la población para que denuncie los casos de extorsión, ya que el miedo a represalias ha permitido que estos grupos sigan operando con impunidad. La falta de denuncias ha dificultado la labor de las autoridades para identificar y capturar a los responsables.
La estrategia busca fortalecer la presencia institucional en territorios priorizados y mejorar la inteligencia estratégica para anticipar y neutralizar las acciones de los grupos armados. Según el ministro, es fundamental trabajar de manera conjunta para enfrentar a un enemigo común que no reconoce límites geográficos y que afecta por igual a ambos departamentos.
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El Consejo de Seguridad concluyó con el compromiso de intensificar las operaciones militares y policiales en la región, con el objetivo de recuperar la tranquilidad y garantizar la seguridad de los habitantes. Las autoridades reiteraron su compromiso de trabajar sin descanso para proteger a la población y desmantelar las estructuras criminales que operan en la zona.
