Alfonso Vélez Jaramillo
Como lo había anticipado, el Huila se queda sin candidato al senado en la lista del Pacto Histórico.
O sea, sin posibilidad de elegir senador de este departamento del Pacto, en las próximas elecciones congresionales.
Esta es la situación, luego de que la mayoría de los dirigentes decidieran aconsejar a sus amigos votar por aspirantes foráneos y no por Leyla María Rincón.
Leyla, no tuvo el apoyo necesario en la consulta interna de ese movimiento político en el Huila, pese a la copiosa votación de más de 40 mil votos que había obtenido la vez pasada para la Cámara.
La expresión «le hicieron la panela» puede significar varias cosas. En un sentido figurado y más coloquial, puede referirse a que alguien fue «engañado» o «manipulado».
Así se avizoraba la situación, dada la escasa atención en el plano regional que le prestó a la gente en estos dos años de Gobierno y trabajo legislativo, de sus más mencionados dirigentes.
«Mencionados» porque no se ven ni se dejan ver.
Si no recomponen el camino de las relaciones de sus dirigentes con la comunidad, inclusive con los medios y periodistas, del Huila, en las próximas elecciones regionales que no esperen mejorar resultados.
Una cosa es el tema nacional con Petro, y otra el asunto local y regional con los dirigentes locales.
Cada quien ayuda a sus amigos y no serán los mismos votos.
A la izquierda no le alcanzan los votos para salir sola. Debe tener apoyo de las distintas vertientes.
Inclusive hubo un grupo que orienta uno de sus directivos regionales, quien ordenó votar por una actriz porno y hasta la invitaron al Huila, de quien no se tenían indecentes de su vida privada ni particular, en este departamento.
La mayoría de los votantes, específicamente, no son militantes del Pacto Histórico, son simpatizantes circunstanciales, y seguro que para asamblea y concejo tendrán más alternativas. O sea, se angosta la brecha.
Es el momento de recomponer la situación, hay que hablar con la gente, escucharla, so pena de no obtener curules del Huila al congreso ni en la Asamblea, como ocurrió en las elecciones regionales pasadas.
Y algo muy importante para quienes manejan los intereses políticos:
Una cosa es gustarle el activismo político y hacer el ejercicio como dirigente, otra es tener el carisma para tratar a la gente y los votos para ser dirigente.
Otra, saber del manejo de una campaña, sin generar rechazo por sus actitudes petulantes y pretenciosas.
Hay quienes sin expresarlo públicamente, sin decirlo directamente generan ese rechazo porque zahieren con su actitud excluyente, o sea, el Yo y solo yo.
Mucho ojo, esto es un campanazo de alerta a tiempo
