La Consejería Comisionada de Paz, dirigida por Otty Patiño, se pronunció tras los recientes ataques armados registrados en Amalfi (Antioquia) y Cali (Valle del Cauca), que dejaron como blanco a integrantes de las Fuerzas Militares y de la Policía.
En un comunicado, la entidad calificó los hechos como “acciones cobardes” que no solo ponen en riesgo la vida de civiles y uniformados, sino que también golpean la esperanza de reconciliación en los territorios.
“Estas acciones cobardes no solo atentan contra la vida de civiles y de quienes cada día trabajan en nombre de nuestro país sino también en contra de la paz que aspiramos construir. Atacan no solo vidas inocentes, sino también la esperanza de avanzar hacia la reconciliación y la superación de la violencia armada”, expresó la Consejería.
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El mensaje dirigido a los grupos armados ilegales fue directo: la violencia no ofrece salidas reales, sino que se mantiene como un obstáculo para transformar las regiones más afectadas por el conflicto.
“Por el contrario, sigue siendo un enorme obstáculo para la construcción de una paz verdadera que transforme la realidad de los territorios vulnerables y lleve dignidad a quienes han tenido que resistir a las violencias y el abandono”, enfatizó la entidad.
Finalmente, la oficina del Consejero Otty Patiño señaló su compromiso con la protección de la vida y con la búsqueda de una paz duradera, asegurando que seguirá impulsando escenarios que permitan superar el miedo y abrir caminos de reconciliación en Colombia.
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