Diario del Huila

Inteligencia artificial y educación rural: ¿utopía o urgencia?

Jul 10, 2025

Diario del Huila Inicio 5 Opinión 5 Inteligencia artificial y educación rural: ¿utopía o urgencia?

Por: Adonis Tupac Ramírez Cuellar

En los debates sobre el impacto de la inteligencia artificial (IA) en la educación, suele privilegiarse una visión urbana, conectada y de alta infraestructura tecnológica. Sin embargo, en las zonas rurales de Colombia, donde las brechas en conectividad, acceso docente y calidad educativa son profundas y persistentes, la IA no debería ser vista como una utopía futurista, sino como una urgencia presente. Negar su potencial transformador es perpetuar un sistema educativo excluyente.

La IA no es una varita mágica, pero puede ser una palanca poderosa. En territorios donde un solo maestro enseña a múltiples grados en condiciones precarias, un tutor virtual personalizado, accesible sin conexión, podría ser la diferencia entre la alfabetización plena o la deserción escolar. En zonas donde la capacitación docente es limitada, plataformas basadas en IA pueden ofrecer formación continua adaptativa, multilingüe y sensible al contexto cultural.

La pregunta no es si debemos llevar la IA a la educación rural, sino cómo hacerlo sin repetir los errores del pasado: soluciones impuestas, sin diálogo comunitario, ni sostenibilidad. La implementación de IA debe ser contextual, ética, equitativa y participativa, sin que los recursos sean robados por los políticos de turno como el caso de centros poblados.

Cinco propuestas para una estrategia de implementación rural de IA en educación:

  1. Diagnóstico territorial con participación comunitaria: Antes de introducir cualquier herramienta de IA, es imprescindible entender las dinámicas locales, niveles de conectividad, prácticas pedagógicas, lenguas indígenas y necesidades reales. No se trata de importar soluciones, sino de co-construirlas.
  2. Desarrollo de contenidos y plataformas off-line: Dado que la conectividad es limitada en muchas zonas rurales, es clave desarrollar soluciones que funcionen sin conexión o con conectividad intermitente. Los modelos de IA pueden ser entrenados y luego desplegados localmente, con actualizaciones periódicas mediante sincronización offline.
  3. Formación docente híbrida y escalable: La IA debe estar al servicio de los docentes, no en su reemplazo. Proponemos un programa nacional de capacitación docente en competencias digitales e inteligencia artificial, con foco en su uso pedagógico crítico y adaptado al contexto rural.
  4. Inversión en infraestructura sostenible y comunitaria: La IA requiere energía y dispositivos. Proyectos de paneles solares comunitarios, centros de acceso digital compartidos y dispositivos de bajo costo pueden garantizar la sostenibilidad de las iniciativas.
  5. Ética y gobernanza inclusiva: Las comunidades deben tener voz en el diseño, uso y evaluación de las herramientas de IA. Esto implica marcos de gobernanza que promuevan la transparencia, la protección de datos de los estudiantes y la soberanía tecnológica.

La educación rural no puede seguir siendo un apéndice olvidado del sistema educativo. La IA, usada con inteligencia política, empatía territorial y visión a largo plazo, puede ser el catalizador que equilibre la balanza. No se trata de un lujo futurista. Se trata de justicia educativa hoy.

Tal vez te gustaría leer esto