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Hermanos ganaderos opitas habían sido secuestrados en Cali

Abr 11, 2025

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Dos hermanos ganaderos de Huila viajaron a Cali con la esperanza de concretar un negocio, pero lo que parecía una oportunidad comercial terminó convirtiéndose en una pesadilla. Secuestrados y sometidos a una exigencia de millonaria extorsión, los hermanos vivieron días de angustia hasta ser rescatados en un operativo de la Fiscalía. La trama, que involucra a varias personas, incluida una mujer transexual, deja al descubierto una compleja red de delincuencia y extorsión.

DIARIO DEL HUILA, PRIMER PLANO

La Fiscalía General de la Nación ha entregado el material probatorio clave que permitió la judicialización de cinco personas presuntamente involucradas en el secuestro de dos hermanos ganaderos de Garzón, Huila, quienes fueron retenidos ilegalmente mientras viajaban hacia la ciudad de Cali, Valle del Cauca, tras hacer un acuerdo de negocio. Según el comunicado oficial de la Fiscalía, los detenidos son Snayder Arlex Rodríguez Carvajal, Cristian David Arboleda Asprilla, Sergio Luis Palacios Córdoba, Leiner Palacio Mosquera y una mujer trans, identificada como Michel Vanesa Hurtado Orobio, quienes enfrentan cargos por el delito de secuestro extorsivo agravado.

Los hechos

Los hechos que se investigan comenzaron el 29 de marzo, cuando los dos hermanos, originarios de Garzón, Huila, hicieron contacto con un supuesto empresario a través de redes sociales, con el fin de concretar un negocio en Cali. La reunión, que inicialmente parecía ser una oportunidad legítima de negocio, se transformó rápidamente en una situación de terror. En el transcurso de su llegada a la capital del Valle del Cauca, un vehículo los recogió en el sector de Ciudad Jardín y los trasladó hacia un lugar desconocido. Fue entonces cuando las víctimas fueron privadas de su libertad.

Los hermanos opitas se encontraban secuestrados en Cali.

A partir de ese momento, las familias de los hermanos comenzaron a recibir angustiosas llamadas telefónicas y fotografías de los secuestrados, en las que se les exigía una cuantiosa suma de dinero para su liberación. Según las autoridades, los secuestradores pidieron una cifra desmesurada: mil millones de pesos, lo que dejó en evidencia la dimensión del crimen y la extrema violencia con la que operaban los delincuentes. Los familiares, desesperados, rápidamente alertaron a las autoridades para que intervinieran en el caso.

Ante la gravedad de los hechos, las autoridades nacionales, en colaboración con la Fiscalía, activaron de inmediato el protocolo de búsqueda y rescate. Se desplegaron varios operativos y un intenso seguimiento para dar con el paradero de los secuestradores. La información recopilada a través de testimonios, grabaciones de cámaras de seguridad y la coordinación con testigos permitió a las autoridades localizar a los sospechosos. Tras una ardua investigación, la Fiscalía logró establecer que las víctimas estaban siendo retenidas en una vivienda ubicada en el barrio Ciudad Córdoba, al suroriente de Cali. Este sitio, que aparentemente pasaba desapercibido, fue el centro de cautiverio de los hermanos ganaderos.

Liberación

En la madrugada del 1 de abril, las autoridades realizaron una diligencia de registro y allanamiento en la mencionada vivienda. Durante el operativo, los hermanos, de 45 y 55 años, fueron liberados y rescatados, evitando así una tragedia mayor. Además, en el mismo procedimiento, las autoridades lograron la captura de las cinco personas que hoy se encuentran procesadas por el delito de secuestro extorsivo agravado. Las autoridades confirman que los detenidos no han aceptado los cargos que se les imputan, por lo que el proceso judicial continuará su curso.

Las víctimas fueron rescatadas en Cali.

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Durante la operación, también se incautaron cinco teléfonos celulares, una motocicleta y dos relojes de alto valor, elementos que podrían estar relacionados con las actividades ilícitas de los secuestradores. Los capturados fueron identificados como Snayder Arlex Rodríguez Carvajal, Cristian David Arboleda Asprilla, Sergio Luis Palacios Córdoba, Leiner Palacio Mosquera y Michel Vanesa Hurtado Orobio, quien es una mujer transgénero. Esta última, al igual que los demás detenidos, enfrenta cargos por secuestro extorsivo agravado, un delito que, de acuerdo con la Fiscalía, tiene una pena severa debido a la gravedad de la situación que los secuestradores sometieron a las víctimas.

El caso de los hermanos ganaderos ha llamado la atención no solo por la violencia del crimen, sino también por la manera en que los delincuentes operaron a través de un supuesto negocio en línea, lo que resalta el riesgo al que están expuestas las personas que realizan transacciones a través de plataformas digitales sin las debidas precauciones. Este tipo de crimen refleja el nivel de sofisticación y la organización que pueden alcanzar los grupos delictivos involucrados en el secuestro y la extorsión. La familia de las víctimas expresó su alivio tras la liberación de los secuestrados, pero también su preocupación por la rapidez con la que estos hechos ocurrieron, lo que los hizo más vulnerables.

Familiares de los secuestrados recibieron las llamadas extorsivas.

El secuestro extorsivo es uno de los crímenes más devastadores, no solo por el sufrimiento físico y emocional de las víctimas, sino también por el impacto que tiene en las familias que deben lidiar con la angustia de no saber si sus seres queridos regresarán con vida. En este caso, el rescate de los hermanos fue posible gracias a la pronta respuesta de las autoridades y la efectiva colaboración entre los diferentes cuerpos de seguridad. Sin embargo, la trama detrás de este secuestro extorsivo no termina con las capturas, ya que la Fiscalía continúa investigando si hay más personas involucradas en la red criminal que operaba en la región.

A pesar de la captura de los cinco implicados, los cuales se encuentran actualmente en prisión preventiva, la Fiscalía ha dejado claro que las investigaciones siguen abiertas. En este sentido, se espera que los detenidos colaboren con la justicia y proporcionen más información sobre las operaciones de este grupo de delincuentes. Además, las autoridades están en proceso de rastrear otros posibles miembros de la red y se han comprometido a llevar el caso hasta sus últimas consecuencias. La detención de estos cinco individuos es un paso importante en la lucha contra el crimen organizado, pero aún queda trabajo por hacer para desmantelar completamente la estructura detrás de este secuestro.

La liberación de los hermanos ganaderos no solo representó un alivio para sus familias, sino también un triunfo para la justicia, ya que demostró la capacidad de las autoridades para reaccionar de manera efectiva frente a este tipo de delitos. La Fiscalía ha reiterado que continuará su lucha contra la extorsión y el secuestro, e instó a la ciudadanía a denunciar cualquier sospecha o indicio de actividades delictivas que puedan poner en riesgo la seguridad de la comunidad.

Este caso también ha resaltado la importancia de la cooperación entre la policía, el Ejército y la Fiscalía para hacer frente a los delitos que afectan a la región. A medida que avanzan las investigaciones, se espera que este secuestro sea solo un ejemplo de los esfuerzos que se están realizando para garantizar la seguridad de los ciudadanos en un país que aún enfrenta desafíos significativos en términos de criminalidad.

Los secuestradores enfrentan cargos por secuestro extorsivo agravado.

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