Esta es la historia de una familia Isnense que después de años de cosechar el café deciden darle una identidad diferente, hoy en día producen y buscan dar a conocer su café molido, tostado, galletas y panderos de café, desde las montañas de Bordones.
DIARIO DEL HUILA, HISTORIA
Por: Leidy Catalina Durán Vásquez
En las montañas del sur del Huila, donde se encuentran los ríos Bordones y Granates, surge un emprendimiento que combina historia, tradición familiar y el inconfundible aroma del café huilense. Se trata de Gran Bordones, una marca que lleva el nombre del lugar donde confluyen las aguas que dan vida a la región y a la historia de su creadora, Marta Yolima Narváez Castro, una mujer del municipio de Isnos que decidió volver a sus raíces para transformar su finca en un proyecto de vida.
“Tenemos la influencia del Parque Puracé de donde nacen los ríos Bordones y Granates y justo en el punto donde está ubicada la finca se unen los dos ríos por eso es el Gran Bordones, ya de ahí en adelante sigue llamando el rio solo Bordones”, precisó la mujer.
Como lo indicó Marta Yolima, el nombre Gran Bordones nace de esa unión entre los dos ríos el Bordones y el Granates que se encuentran justo en el punto donde está ubicada la finca.
“Ese lugar es parte de mi historia: crecí cruzando ese puente todos los días para ir a la escuela, a veces un rio estaba más crecido que el otro, o los dos, pero ahí es donde nacimos y crecimos, por eso, decidí volver a la finca”, cuenta Marta Yolima con orgullo.
Un regreso a la tierra
Después de varios años, Marta decidió regresar a la finca donde nació y emprender con el cultivo del café. Aunque la producción lleva más de 12 años, el emprendimiento formal como marca de café tostado y productos derivados está a punto de cumplir su primer año, un año lleno de resto y de ilusión por seguir creciendo, para que más personas conozcan de su producto, lo consuman y disfruten de la riqueza del café de Isnos.
“Estamos empezando con mucha ilusión. Producimos el café, hacemos su proceso de fermentación y luego lo enviamos a tostar a una empresa aliada. Elaboramos presentaciones en grano y molido, y también productos innovadores como galletas y panderos hechos con nuestro propio café, estamos en el proceso de mejorar porque esto es un proceso largo y el café tiene mucho por hacer con él”, reveló la emprendedora.
Gran Bordones es un emprendimiento familiar, en el que participan su esposo, su hija y una prima que apoya en el diseño de etiquetas y empaques. “Todo lo hacemos con amor y a mano. Queremos que cada empaque cuente nuestra historia y el sabor del territorio”, afirmó Marta Yolima.
“Las galletas las preparamos nosotros, el café lo producimos le hacemos sus procesos de fermentación, pero ya la tostión sí la mandamos a hacer a una empresa aparte”, expresó la mujer.
Los precios
El café se comercializa actualmente en presentaciones de libra y media libra, con precios de $52.000 y $27.000 respectivamente. Las galletas y panderos de café, elaborados con trocitos y molienda gruesa del mismo grano, se ofrecen en empaques de $5.000, $6.000 y $8.000.
“Las galletas tenemos paqueticos de 5000 pesos, tenemos los panderos que son elaborados de café, llevan trocitos de café, le hicimos una molienda gruesa. Tenemos una presentación de 6000 pesos y 8000”, contó la cafetera.
Aunque el producto comenzó a venderse entre familiares y amigos, hoy ya ha salido del municipio de Isnos y empieza a posicionarse en mercados como Pitalito y Bogotá.
“Estamos apenas en ese proceso de que la gente conozca de nuestro producto porque no es fácil, hemos empezado con las personas allegadas, los amigos, familiares y en esa medida se ha ido de a poquito conociendo nuestro producto donde ya ha salió del municipio, y se comercializa más que todo en parte de Pitalito y Bogotá”, expresó Marta.
El reto de posicionar un café con identidad
“Lo más difícil ha sido darnos a conocer”, enfatizó Marta. “Pero poco a poco la gente va probando y recomendando el café. Esto es un proceso largo, y el café tiene mucho por mostrar”.
Con su constancia y el apoyo de su familia, Marta Yolima Narváez está demostrando que el emprendimiento rural es una forma de preservar las tradiciones, impulsar la economía familiar y dar a conocer el valor de los productos que nacen en las montañas del Huila.
“Gran Bordones no es solo café, es la historia de una familia, de una tierra y de dos ríos que nos enseñan que cuando las fuerzas se unen, fluyen con más fuerza”, concluye con una sonrisa.
