La relación entre el presidente Gustavo Petro y su gabinete está en su punto más crítico. Durante el consejo de ministros del 15 de julio, el mandatario expresó su profunda insatisfacción con la gestión de varios funcionarios, anticipó cambios “radicales” y acusó a algunos de traicionar el proyecto político que lo llevó al poder. Se avecina un nuevo remezón ministerial, el cuarto en lo que va de su mandato.
DIARIO DEL HUILA, POLITICA
El presidente Gustavo Petro arremetió contra su equipo ministerial en un consejo de ministros que dejó claro el nivel de fractura interna que atraviesa su gobierno. Con un tono airado, el jefe de Estado cuestionó la lealtad de varios ministros, criticó la ejecución del programa de gobierno y anunció ajustes profundos en la composición del gabinete para el último año de su administración.
“Yo no puedo retener mi último año de gobierno con gente que no sepa el programa de gobierno y que no lo aplique. El pueblo votó por unos objetivos y al pueblo se le respeta. No hay norma o ley que se pueda oponer a la voluntad del pueblo”, expresó el mandatario, visiblemente molesto por la manera en que se ha venido ejecutando el presupuesto nacional para el 2026.
Uno de los principales motivos de su inconformidad es la reducción del gasto social en la propuesta presupuestal elaborada por el Ministerio de Hacienda. Petro denunció que este documento fue construido en favor del “gran capital”, en contravía del mandato popular que, según él, recibió en las urnas. “Me respetan, y el que no quiera respetarme, se va”, dijo sin rodeos.
El gobierno de Petro ha sido marcado por una altísima rotación en sus ministerios: 52 ministros han pasado por su gabinete en menos de tres años. Se espera que en los próximos días se sume el número 53, tras la salida de Laura Sarabia de la Cancillería, ahora en encargo de Rosa Villavicencio. Esta inestabilidad es un reflejo de las tensiones internas y del giro progresivo del presidente hacia un círculo de confianza cada vez más reducido e ideológicamente homogéneo.
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El mandatario también apuntó directamente al Ministerio de la Igualdad, encabezado por Carlos Rosero, señalando divisiones internas y la remoción de funcionarios que en su momento hicieron parte de su equipo en Bogotá Humana. “Usted me está echando los funcionarios que, en Bogotá Humana, demostraron su lucha”, dijo Petro, y reprochó que no se haya cumplido su orden de vincular a figuras polémicas como los actores porno Juan Carlos Florián y Amaranta Hank.
Las críticas también alcanzaron a las carteras de Ambiente, Vivienda, Hacienda y Minas. Petro acusó a la ministra de Ambiente, Lena Estrada, de entregar la Corporación del Macarena (Cormacarena) a sectores de derecha, comprometiendo la protección de esa región estratégica para el medio ambiente: “Eso no puede ser en este gobierno, cambia”, sentenció.
Este sería el cuarto gran remezón en el gabinete de Petro. En febrero de 2023, salieron Alejandro Gaviria (Educación), María Isabel Urrutia (Deporte) y Patricia Ariza (Cultura). En abril de ese mismo año, tras romper con la coalición de gobierno, salieron figuras clave como Alfonso Prada (Interior), José Antonio Ocampo (Hacienda), Cecilia López (Agricultura), y Carolina Corcho (Salud). Luego vinieron otras salidas notables como la de Irene Vélez (Minas), Astrid Rodríguez (Deporte) y Álvaro Leyva (Cancillería), este último por el escándalo de los pasaportes.
A mediados de 2024, nuevos cambios sacudieron el Ejecutivo con la salida de Luis Fernando Velasco, Néstor Osuna, Jhenifer Mojica, Germán Umaña, Aurora Vergara, Catalina Velasco y William Camargo. Ricardo Bonilla abandonó el Ministerio de Hacienda en diciembre por su relación con el escándalo de la UNGRD.
Y en el primer trimestre de 2025, se dio el golpe más fuerte con la salida de 12 ministros, entre ellos Juan Fernando Cristo, Iván Velásquez, Gloria Inés Ramírez, Andrés Camacho, Mauricio Lizcano y la propia Francia Márquez, quien, aunque sigue siendo vicepresidenta, se mantiene alejada del Ejecutivo y estaría haciendo movimientos políticos con miras a las elecciones de 2026.
La oposición no ha tardado en reaccionar. La representante Marelen Castillo cuestionó la reiterada inestabilidad del gobierno: “Si en tres años no lo logró, rotando ministros una y otra vez, ¿de verdad cree que ahora va a lograr lo que no pudo construir con estabilidad, liderazgo y coherencia?”. Por su parte, Carolina Arbeláez fue más directa: “El problema no es el gabinete, el problema es el Presidente”.
Pese a las críticas, Gustavo Petro se mantiene firme en su decisión de reformar nuevamente su equipo de gobierno. “Me critican, pero es que no encuentro un gabinete que cumpla el programa de gobierno”, afirmó ante sus ministros, quienes escucharon en silencio y ahora esperan su suerte en medio de un clima de creciente tensión e incertidumbre política.
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