DESHOJANDO MARGARITAS
Por Margarita Suárez
Desde la distancia estoy “en modo Sampedro”, viviendo las festividades folclóricas del Huila, que van del 13 al 30 de junio. Este “milagro” se debe a que recibo a toda hora información de primera mano y de primera clase de nuestras fiestas, a través de fotos, videos, entrevistas en audio y en TV, crónicas en periódicos y todo tipo de informes en plataformas y redes sociales. Nunca, como en esta última década, las festividades del Huila, habían sido tan universales y tan divulgadas. Desde lejos estamos enterados de cada paso que recorre nuestro querido “Festival del Bambuco en San Juan y San Pedro”, como se denomina hoy, versión 64. Recuerdo con admiración y nostalgia, la época en que dirigía el Festival nuestra desaparecida ejecutiva, Maruja Fernández de Giraldo, la persona que dio el mayor empujón a nuestras fiestas. Era nacida en España, pero tenía “alma del Huila”, como dice nuestro Himno compuesto por el Maestro Luis Alberto Osorio. Maruja tenía que hacer malabares para que un canal nacional transmitiera los eventos. Conseguir patrocinios con empresas para financiar a quien cubriera las fiestas. Tocando muchas puertas lograba su objetivo de mostrar las fiestas folclóricas y la elección y coronación de las reinas del bambuco. Hoy día todo es inmediato. Se publica, a veces sin costo, porque cualquiera saca un celular y empieza a mostrar imágenes y contar lo que está pasando, bien sea en la inauguración, las cabalgatas, los concursos y encuentros folclóricos, ferias artesanales y gastronómicas, el reinado, los tablados y los desfiles que podemos disfrutar como si estuviéramos en un palco. A CorpoSanpedro, la actual entidad organizadora le queda un poco más suave hoy día preparar la programación, trabajan casi todo el año en ese propósito. Antes, las directoras del Festival empezaban tarde y les cogía la noche buscando recursos y cuadrando la extensa programación. Veo que Adriana Rojas Salazar, directora general de CorpoSanpedro, desde hace varios años, resultó una buena ejecutiva, tiene carácter, es organizada, no se deja enredar de nadie y desarrolla con profesionalismo su tarea. Ahora lo importante es que lleguen los turistas y poderles mostrar, con cara amable, la belleza de nuestras tradiciones.
