El Huila, corazón de la caficultura colombiana y responsable del 19,08 % de la producción nacional, es protagonista en el 93 Congreso Nacional de Cafeteros. Con cifras récord en producción y exportaciones, el departamento enfrenta desafíos como la inseguridad y los altos costos de producción, mientras se perfila como un modelo de resiliencia y sostenibilidad para el sector.
DIARIO DEL HUILA, CONTEXTO
Por: María Camila Mosquera M.
En medio de una coyuntura favorable por el aumento de la producción y los altos precios internacionales y nacionales, el sector cafetero celebra del 4 al 6 de diciembre su 93 Congreso Nacional. Este evento emblemático marca un nuevo capítulo bajo la dirección de Germán Bahamón, gerente general de la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), quien se enfrenta al reto de consolidar un sector que avanza hacia la sostenibilidad, pero también lidia con desafíos logísticos y de seguridad.
El Contexto Económico: Un Equilibrio Precario
Las recientes semanas han sido testigos de un hito en el mercado internacional: el precio del café en la Bolsa de Nueva York superó los tres dólares por libra, un valor no visto en años y que se ha reflejado en el precio pagado al productor colombiano, alcanzando cifras de $2.785.000 por cada saco de 125 kilos. Sin embargo, Germán Bahamón ha sido claro al afirmar que esto no constituye una bonanza cafetera. «2023 fue uno de los años más difíciles para los productores, con rentabilidad golpeada tras tres años de lluvias intensas. Lo que vemos ahora apenas compensa esas pérdidas», explicó el gerente gremial.
Resultados Históricos y el Esfuerzo Colectivo
En 2024, la producción cafetera alcanzó 13,41 millones de sacos de 60 kg, un crecimiento acumulado del 21%. Solo en noviembre, la producción creció un 37% en comparación con el mismo mes del año anterior. Este logro es fruto de la resiliencia de los caficultores y de una gestión gremial comprometida. En términos económicos, la caficultura aportó $14,2 billones de pesos, con un crecimiento del 26% y un aumento del 108% en el cuarto trimestre.
Las exportaciones de café entre enero y octubre de este año crecieron un 17%, con 9,8 millones de sacos enviados a destinos clave como Estados Unidos, Canadá, Bélgica, Alemania y Japón. Este crecimiento se ha visto impulsado por la reducción en las expectativas de producción en Brasil, afectado por sequías e incendios, lo que ha elevado los precios internacionales por encima de 3,20 dólares por libra.
Innovación, Sostenibilidad y Renovación
Bahamón destacó en redes sociales la tenacidad de los cafeteros, quienes lograron una producción de 12,9 millones de sacos en más de 600.000 fincas, un crecimiento del 19%. Además, resaltó los avances en renovación cafetera, con 63.000 hectáreas renovadas en 2022, 77.000 en 2023 y una proyección de más de 90.000 hectáreas para este año.
La implementación de nuevas tecnologías, mejores prácticas agrícolas y programas de capacitación ha permitido incrementar la productividad por hectárea, compensando los efectos negativos de fenómenos climáticos previos. Asimismo, la FNC lidera el cumplimiento de los estándares del Pacto Verde Europeo, posicionando a Colombia como uno de los primeros países en cumplir regulaciones de no deforestación.
Fortalecimiento del Comercio y los Actores del Sector
El informe presentado durante el Congreso destacó el crecimiento en las exportaciones, que aumentaron un 20%, mientras que la división comercial de Craft Coffees triplicó sus cifras, exportando más de 26.000 sacos en 2024. Procafecol, a través de su marca Juan Valdez, logró expandirse a mercados estratégicos como Estados Unidos, Canadá, México y Brasil. Por su parte, Buencafé presentó innovaciones que ampliaron las oportunidades de consumo, y Almacafé cerró el año con récords de ingresos y rentabilidad.
Además, se destacó la necesidad de fortalecer alianzas internacionales y abrir nuevos mercados. Países asiáticos como China y Corea del Sur han mostrado un creciente interés en el café colombiano, lo que representa una oportunidad de diversificación que podría asegurar el crecimiento del sector a largo plazo.
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Los Desafíos Persistentes: Logística y Seguridad
No todo son buenas noticias. Gustavo Gómez, presidente de Asoexport, advirtió sobre problemas logísticos que amenazan con frenar el potencial exportador del sector. La falta de contenedores y la congestión en puertos están retrasando el embarque de café hacia destinos clave. Esto no solo incrementa los costos, sino que también afecta la calidad del café almacenado durante largos periodos.
Javier Díaz, presidente de Analdex, subrayó los riesgos para la calidad e inocuidad del grano, y advirtió que la acumulación de café en terminales marítimos genera sobrecostos que afectan la competitividad frente a otros países productores.
La inseguridad en regiones productoras clave, como Huila, Tolima y Cauca, también ha incrementado extorsiones y robos, desincentivando la inversión. «La situación de seguridad es preocupante, y necesitamos más apoyo para proteger a los productores», afirmó Bahamón.
Asimismo, los altos costos de producción, especialmente en mano de obra y fertilizantes, siguen impactando la rentabilidad de los caficultores. Aunque el gremio ha implementado estrategias para reducir costos mediante el uso de tecnología, el impacto aún es significativo para los pequeños y medianos productores.
Llamados a la Acción y el Futuro del Sector
Bahamón instó al Gobierno Nacional a apoyar financieramente el sistema cooperativo, clave para garantizar la estabilidad del sector. También propuso la creación de un fondo rotativo de fertilización con un aporte inicial de $10.000 millones para fortalecer la sostenibilidad productiva y económica.
El Congreso también puso en el centro del debate la necesidad de políticas públicas que fortalezcan la infraestructura logística y de transporte. En este sentido, se exploraron posibles soluciones como la modernización de puertos y una mayor diversificación de las rutas de exportación para minimizar los cuellos de botella actuales.
Por otro lado, se hizo énfasis en la promoción del consumo interno de café. Aunque Colombia es un importante exportador, el consumo local aún tiene espacio para crecer. Campañas de educación y promoción del café especial colombiano podrían aumentar la demanda interna, beneficiando directamente a los productores.
En palabras de Teodoro Hernán Oza Anaya, presidente del Comité Departamental de Cafeteros del Huila, «el balance es positivo, pero necesitamos un respaldo decidido del Gobierno para enfrentar los retos».
Un Sector en Evolución
El 93 Congreso Nacional de Cafeteros reafirma su papel como el principal foro de discusión y toma de decisiones del sector. Bajo el liderazgo de Germán Bahamón, la caficultura colombiana se proyecta hacia un futuro de innovación, sostenibilidad y competitividad global. Sin embargo, el camino está lleno de desafíos que requerirán esfuerzos conjuntos entre el gremio, el Gobierno y la comunidad internacional para consolidar a Colombia como líder mundial en la industria del café.
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