La administración del presidente Donald Trump dio un nuevo giro restrictivo a su política migratoria al ordenar la suspensión de los procesos de residencia permanente y ciudadanía para nacionales de 19 países, entre ellos Cuba, Haití y Venezuela.
La decisión, consignada en un memorando oficial revelado por la agencia AFP, se suma a una serie de acciones recientes con las que la Casa Blanca busca imponer mayores controles al ingreso y permanencia de extranjeros en territorio estadounidense.
Cuba, Haití y Venezuela han sido el foco principal de este reforzamiento migratorio, dentro de un contexto marcado por tensiones diplomáticas, crisis humanitarias y señalamientos de seguridad. Con Venezuela, en particular, el gobierno estadounidense ha aumentado la presión al justificar un despliegue militar en el Caribe como una operación antidrogas; sin embargo, Caracas sostiene que se trata de un intento por derrocar a Nicolás Maduro.
Puede leer: Maduro habría pedido amnistía a Trump
La lista completa de países afectados incluye además a Afganistán, Birmania, Burundi, Chad, Eritrea, Guinea Ecuatorial, Irán, Laos, Libia, República del Congo, Sierra Leona, Somalia, Sudán, Togo, Turkmenistán y Yemen; naciones que ya habían sido objeto de restricciones de viaje en junio pasado.
El documento argumenta que el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) debe priorizar la seguridad nacional y evitar que individuos potencialmente peligrosos accedan a beneficios migratorios. Para el gobierno, el reciente ataque contra personal de la Guardia Nacional cerca de la Casa Blanca —cuyos responsables serían de origen afgano— es una señal de alerta sobre los riesgos asociados a la falta de control.
En este contexto, Trump ha insistido en que su administración avanzará en la deportación masiva de indocumentados y en el fortalecimiento del sistema de verificación migratoria. Incluso ha planteado una restricción mayor a la llegada de migrantes provenientes del llamado “tercer mundo”, al considerar que el sistema estadounidense necesita recuperarse del incremento de solicitudes de asilo y trámites migratorios.
Mientras tanto, dentro del propio gabinete ya se escuchan voces que piden ir más allá. La secretaria de Seguridad Interior, Kristi Noem, sugirió ampliar la lista de naciones con prohibiciones de viaje, al tiempo que defendió una postura más radical frente a la migración.
Según medios estadounidenses, el Gobierno federal también prepara operativos migratorios en estados como Minnesota, particularmente enfocados en ciudadanos somalíes, lo que ha generado rechazo de autoridades locales que se niegan a cooperar.
Le puede interesar: Congreso de EEUU investigará a gobierno por ataques en el Caribe










