El uso indiscriminado de pólvora provocó la muerte de dos antílopes de la India, en el Zoológico de Cali.
Según el personal del zoológico, el estruendo generado por los artefactos pirotécnicos causó tal nivel de estrés en los animales que estos se golpearon repetidamente contra los muros de su hábitat, sufriendo múltiples fracturas.
La médico veterinaria Juliana Peña explicó a Blu Radio que los efectos de la pólvora en los animales van más allá de lo auditivo. Las ondas expansivas, los destellos de luz e incluso los olores pueden desencadenar comportamientos extremos de pánico. “Por el estrés, nuestros animales pueden correr, golpearse y, en algunos casos, morir”, afirmó Peña.
El caso de los antílopes no es aislado. Las aves del zoológico, por ejemplo, intentan volar en medio del caos provocado por la pólvora, chocándose contra las estructuras de sus recintos. “Al día siguiente encontramos plumas en el suelo, un reflejo del pánico que experimentan”, añadió Peña.
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Incluso los peces, que carecen de oídos externos, intentan saltar del agua o esconderse al percibir las vibraciones y el caos a su alrededor. Otras especies también sufren agresiones entre sí, al malinterpretar los sonidos como amenazas.
La necesidad de medidas restrictivas
Aunque las festividades con pólvora forman parte de tradiciones culturales, animalista insisten en la importancia de establecer regulaciones estrictas para su uso.
El llamado de las autoridades es a optar por celebraciones sin pólvora: Sustituir el uso de pirotecnia por alternativas como velas, linternas y actividades familiares que no generen estruendo.
Denunciar el uso irresponsable: Informar a las autoridades sobre el uso desmedido de pólvora en áreas donde pueda afectar a animales o personas vulnerables.
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