Un fuerte debate se desató en Colombia tras las declaraciones del alcalde de Cúcuta, Jorge Acevedo, quien recomendó a los padres de familia “agarrar a juete” a sus hijos si detectan comportamientos inadecuados. El comentario fue emitido en medio de una entrevista durante la Semana Santa, en la que el mandatario exhortó a “corregir a los muchachos como era antes”, generando reacciones divididas en redes sociales y una contundente respuesta por parte de la Defensoría del Pueblo.
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Durante su intervención, Acevedo hizo un llamado a retomar la crianza tradicional basada en valores y disciplina. “Que los pongan a rezar, que les den principios, que les den valores. Dele juete si están cogiendo mal camino”, dijo mientras hacía referencia a varios jóvenes capturados por presuntos delitos de extorsión. Las palabras del alcalde fueron luego difundidas por él mismo a través de sus redes sociales.
Mientras algunos ciudadanos respaldaron el mensaje, calificándolo como “un llamado lógico a recuperar la autoridad en casa”, otros lo reprobaron por considerar que promueve prácticas de violencia contra menores. La frase “ahora no se les puede ni mirar” también fue criticada por normalizar el castigo físico como método de crianza, algo que contraviene los principios actuales de protección infantil.
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Frente a la controversia, la defensora del pueblo, Iris Marín Ortiz, rechazó públicamente las afirmaciones del mandatario. “Golpear o maltratar a un niño no es ejercer autoridad, es quebrantar su humanidad”, afirmó. Además, recalcó que “criar es un acto de amor y confianza, no de represión y de miedo”, destacando que expresiones como “la letra con sangre entra” son obsoletas y contrarias al rol protector que debe tener la familia.
