El Vaticano confirmó este lunes 21 de abril que el Papa Francisco falleció como consecuencia de un ictus cerebral y un colapso cardiovascular irreversible. La información fue oficializada en el acta de defunción firmada por el profesor Andrea Arcangeli, director de la Dirección de Sanidad e Higiene del Estado de la Ciudad del Vaticano.
Según el parte médico, el deceso se produjo a las 7:35 a.m. en su apartamento de la Casa Santa Marta. El diagnóstico fue respaldado por un estudio electrocardiográfico tanatológico, que permitió certificar científicamente la muerte del Pontífice.
El documento también detalla que el Papa Francisco tenía antecedentes clínicos relevantes, incluyendo insuficiencia respiratoria aguda derivada de una neumonía bilateral multimicrobiana, bronquiectasias múltiples, hipertensión y diabetes tipo II. Estos factores habrían agravado su estado de salud en los últimos meses, hasta llevar al desenlace final.
Le puede interesar: Papa Francisco fue el número 266: así ha sido la historia de los sumos pontífices en la Iglesia católica
Como parte del protocolo, la Oficina de las Celebraciones Litúrgicas del Sumo Pontífice informó que este mismo lunes en la noche, a las 8:00 p.m., se realizará el rito de constatación de la muerte y la colocación del cuerpo en el féretro. La ceremonia será presidida por el cardenal Kevin Joseph Farrell, Camarlengo de la Santa Romana Iglesia, en la Capilla de la Domus Sanctæ Marthæ.
El cuerpo del Santo Padre será trasladado a la Basílica de San Pedro el próximo miércoles 23 de abril, donde los fieles podrán rendir homenaje. Los detalles logísticos de este traslado serán anunciados tras la primera Congregación General de los Cardenales.
Con este anuncio, se activa el protocolo establecido en el Ordo Exsequiarum Romani Pontificis, que regula los ritos fúnebres y el inicio del proceso para la elección del nuevo Papa.
Puede leer: La huella del Papa Francisco en Colombia









