El papa León XIV expresó su preocupación por el creciente despliegue militar de Estados Unidos en las aguas del Caribe y el Pacífico, cerca de las costas venezolanas, una operación que ha intensificado las tensiones en la región y ha dejado decenas de muertos en los últimos meses.
Durante una intervención desde el Vaticano, el pontífice hizo un llamado al diálogo y a la reflexión, señalando que la violencia no puede ser el camino para resolver los conflictos internacionales.
“Con la violencia no ganamos. Lo que hay que hacer es buscar el diálogo (…) Jesús dice muy claramente que al final del mundo se nos preguntará cómo recibimos al extranjero, si lo recibimos y le dimos la bienvenida o no”, afirmó el papa.
El líder de la Iglesia Católica subrayó que, aunque los países tienen derecho a contar con fuerzas armadas para garantizar la paz, el actual despliegue estadounidense representa una excepción preocupante, pues ha generado un aumento de la tensión y del sufrimiento en comunidades inocentes.
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“Creo que hay que reflexionar profundamente sobre lo que está sucediendo. Muchas personas que han vivido durante años y años sin causar nunca problemas se han visto profundamente afectadas por lo que está ocurriendo ahora mismo”, agregó.
El operativo militar fue puesto en marcha a inicios de agosto por el presidente Donald Trump, con el argumento de impedir el tráfico de drogas desde Sudamérica hacia el norte del continente. La primera intervención, ocurrida el 2 de septiembre, consistió en el ataque aéreo contra una embarcación proveniente de Venezuela que, según el gobierno estadounidense, pertenecía al grupo criminal Tren de Aragua, y dejó 11 personas muertas.
Desde entonces, Washington ha ejecutado más de 15 operaciones navales y aéreas, con un saldo superior a 60 fallecidos. Pese a las críticas internacionales, Trump ha insistido en que se trata de acciones necesarias para la seguridad nacional.
Los ataques más recientes, realizados el 1 y 4 de noviembre en el Caribe y el Pacífico, causaron la muerte de cinco personas.
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