Redacción Web
En medio de un proceso migratorio que ha generado tensiones diplomáticas entre Colombia y Ecuador. Migración Colombia informó que ha recibido a 410 ciudadanos colombianos deportados por las autoridades ecuatorianas en las últimas 24 horas. La mayoría de estas personas llegaron al país por el Puesto de Control Migratorio Terrestre (PCMT) de Rumichaca, ubicado en la frontera entre ambos países.
Según el informe de la autoridad migratoria. El ingreso de estas personas se registró entre las 3:00 p.m. del 25 de julio y las 4:15 p.m. del 26 de julio. Durante ese periodo, se identificó que al menos 11 de los ciudadanos deportados tenían órdenes de captura vigentes en Colombia. Por lo que fueron puestos de inmediato a disposición de las autoridades judiciales.
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El gobierno colombiano activó un plan especial de contingencia para la recepción humanitaria, segura y ordenada de los deportados. En esta estrategia participan, además de Migración Colombia, el CTI de la Fiscalía General de la Nación, la Policía Nacional, el Ejército y la Secretaría de Gobierno del municipio de Ipiales. Este protocolo contempla la toma de huellas dactilares para verificar la identidad de los repatriados con base en los registros de la Registraduría Nacional del Estado Civil, así como el control migratorio correspondiente.

Vienen mil más
Migración Colombia también advirtió que en los próximos días se espera el ingreso de por lo menos mil ciudadanos colombianos más en condiciones similares. Esta situación se ha convertido en un desafío logístico y diplomático, dado que, según la Cancillería de Colombia, no se han cumplido los procedimientos formales de coordinación ni de verificación de nacionalidad e identidad por parte del gobierno ecuatoriano.
De hecho, la Cancillería colombiana calificó la medida de Ecuador como un “gesto inamistoso”, argumentando que fue una acción unilateral que impidió establecer protocolos adecuados de entrega, como lo exige el derecho internacional. Además, se denunció la falta de información sobre el historial judicial de los deportados, lo que ha dificultado la evaluación individual de cada caso.
‘No es una deportación colectiva: Ecuador’
Por su parte, el gobierno ecuatoriano ha negado que se trate de una deportación colectiva y ha asegurado que cada procedimiento fue realizado de forma individual, cumpliendo con las leyes vigentes y las normas internacionales sobre migración y derechos humanos. Según documentos oficiales, cada ciudadano fue expulsado mediante resolución individual y con la correspondiente boleta de excarcelación.
Esta serie de eventos ha tensado las relaciones entre los dos países. El gobierno colombiano anunció que evalúa nuevas acciones diplomáticas para proteger a sus connacionales y garantizar el respeto a sus derechos durante este proceso.
La situación pone en evidencia los desafíos que aún existen en la región en materia de política migratoria, cooperación binacional y respeto por los derechos fundamentales de las personas en situación de movilidad.
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