La Amazonía colombiana registró una reducción del 16% en las alertas de deforestación entre abril y junio de 2025 en comparación con el mismo periodo del año anterior, de acuerdo con el Boletín Trimestral de Detección Temprana de Deforestación del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam).
Durante este trimestre, la pérdida estimada de bosque fue de 1.198 hectáreas, frente a las 1.419 hectáreas reportadas en 2024, lo que representa la segunda cifra más baja de los últimos cinco años. El departamento del Caquetá, junto con Meta, presentó una disminución significativa en las áreas afectadas, mientras que Guaviare y Putumayo mantuvieron niveles de alerta por incremento en la tala.
La ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible (e), Irene Vélez Torres, destacó los avances en la protección de los bosques amazónicos:
“Este es un logro que nos llena de esperanza, pues alcanzamos la segunda cifra más baja estimada de alertas trimestrales de deforestación en los últimos cinco años. Estas cifras nos demuestran que sí es posible frenar la deforestación siempre que haya una decisión estatal de dignificar la vida rural a través de la restauración y conservación de los bosques”.
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Según el Ideam, la reducción más importante se registró en Meta (-345 hectáreas) y Caquetá (-213 hectáreas), mientras que los incrementos más notorios ocurrieron en Guaviare (+167 hectáreas) y Putumayo (+140 hectáreas). Además, a nivel nacional, solo se identificó un núcleo de alerta temprana, la cifra más baja estimada en cinco años.
Los municipios con mayor afectación durante el periodo fueron Vistahermosa (Meta), Valle del Guamuez (Putumayo), El Retorno (Guaviare) y Calamar (Guaviare).
Entre las principales causas de deforestación, el Ideam señaló la praderización para acaparamiento de tierras, la expansión agrícola industrial y la construcción de infraestructura vial no planificada.
Por su parte, la directora del Ideam, Ghisliane Echeverry, resaltó la importancia del monitoreo continuo:
“Contamos con un sistema sólido y confiable que permite detectar de manera temprana la deforestación con periodicidad trimestral. Con el Sistema de Monitoreo de Bosques y Carbono generamos información oficial y constante sobre los cambios en la cobertura forestal y las causas que los generan, ofreciendo al país y al mundo datos confiables para la toma de decisiones”.
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