Ruber Bustos Ramírez
El café ha sido un símbolo de identidad para Colombia durante generaciones. Sin embargo, su evolución reciente en el mercado de consumo masivo ha demostrado que su potencial va mucho más allá de la tradición. Hoy, el café colombiano se reinventa mediante la innovación, fusionando la calidad de nuestros caficultores con las demandas de los consumidores modernos.
Un ejemplo clave de esta transformación es el lanzamiento de Club Colombia con café sin alcohol, fruto de una alianza entre Bavaria y Juan Valdez. Esta bebida representa una mezcla única entre la maestría cervecera y el sabor del café colombiano de origen, que busca ofrecer una experiencia sofisticada al consumidor. Es una edición especial que responde a la tendencia global de bebidas premium sin alcohol, utilizando café liofilizado de alta calidad para preservar el auténtico sabor del grano colombiano. La meticulosa elaboración de esta bebida mantiene las notas características de la cerveza, pero con un perfil suave y profundo de café, resaltando el potencial versátil de ambos productos.
La apuesta por esta fusión no es accidental. Según datos de Kantar, el 88% de los colombianos consume al menos una taza de café a la semana, mientras que 6 de cada 10 personas beben cerveza con regularidad. Esto establece un terreno fértil para productos que combinen ambos mundos, tan arraigados en nuestra cultura. Este lanzamiento, que ha despertado gran interés, también forma parte de una estrategia global de Bavaria para explorar opciones sin alcohol, alineada con la tendencia de consumo consciente, donde la calidad del café es una protagonista indiscutible.
Paralelamente, Buendía ha llegado al mercado con una propuesta de alto valor: Buendía Latte. Este nuevo producto, que utiliza café liofilizado premium, se inserta en la creciente tendencia del café frío. El uso de la liofilización —un proceso que garantiza la conservación de los aromas y sabores originales del café— asegura que cada lata contenga la misma calidad que ha caracterizado a Buendía en el café soluble. Esta innovación responde a la demanda global de bebidas listas para consumir, especialmente entre los jóvenes que buscan conveniencia sin sacrificar calidad. Buendía Latte no solo lleva el café colombiano a nuevos mercados, sino que también refuerza su posicionamiento dentro del segmento de bebidas listas para beber (RTD, por sus siglas en inglés).
Ambos lanzamientos son testimonio de cómo la institucionalidad cafetera, representada por marcas icónicas como Juan Valdez y Buendía, sigue impulsando la transformación del café colombiano. Estos productos no solo diversifican el mercado, sino que posicionan al café como un ingrediente clave en la innovación del país, reflejando el compromiso de los caficultores por mantener la excelencia en cada etapa de la cadena de valor.
Este avance es un claro reflejo de la visión estratégica de la Gerencia General de la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), que ha trabajado incansablemente para renovar constantemente la industria, uniendo tradición e innovación para asegurar el futuro del café colombiano en un mundo globalizado. Así, estos pasos representan el compromiso de seguir impulsando el café como un motor de desarrollo y una joya que destaca por su calidad en todos los rincones del planeta.
Como caficultores y colombianos, debemos apoyar lo nuestro, respaldar nuestra tradición, nuestra cultura y el talento que nos representa. Tomemos buen café, el verdadero café colombiano, porque cada taza es un tributo a quienes lo cultivamos, lo transformamos y quienes lo hacen llegar con orgullo a nuestras mesas. ¡Que viva el café colombiano!








