Una comisión técnica de la Gobernación del Huila, integrada por profesionales de la Oficina para la Gestión del Riesgo de Desastres y la Secretaría de Vías e Infraestructura, se desplazó hasta el municipio de Colombia para atender una emergencia causada por la actual temporada de lluvias. El evento, un deslizamiento de tierra de gran magnitud ocurrido en la vereda Bernaza, generó alerta entre las autoridades y habitantes del sector.
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Según el análisis en terreno, las precipitaciones intensas en la zona norte del departamento ocasionaron una alta saturación del suelo, caracterizado por ser arcilloso y de consistencia blanda, lo que facilitó el desprendimiento de masas desde las zonas altas. El geólogo Jorge Leonardo Chaparro, miembro de la comisión, explicó que el encharcamiento acumulado en el terreno fue determinante para el movimiento de tierra que se extendió hasta las cercanías del cauce del río Blanco.
La comisión recomendó de manera enfática a la administración municipal abstenerse de realizar intervenciones con maquinaria pesada, debido al riesgo latente que representa la inestabilidad del terreno. Se solicitó a la comunidad evitar transitar por el área afectada, dado que el riesgo de nuevos desprendimientos persiste. Estas sugerencias se fundamentan en los principios establecidos por la Ley 1523 de 2012, que rige la gestión del riesgo de desastres en el país.
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El Gobierno Departamental anunció que continuará articulando acciones con los entes locales y comunitarios para atender esta emergencia, mientras se esperan condiciones climáticas más favorables. Además, se elaborará un informe técnico con las recomendaciones pertinentes a corto, mediano y largo plazo, el cual será remitido a las autoridades competentes para tomar decisiones frente a la estabilización del terreno y la protección de las familias del sector.
