El presidente del Concejo de El Hobo, Víctor Arley Chavarro Moreno, resultó herido tras un atentado armado registrado la noche del sábado en un establecimiento de su propiedad. En el ataque también fue alcanzada por una bala una mujer identificada como Elsa Marquínez. Las autoridades adelantan un operativo para dar con los responsables.
DIARIO DEL HUILA, JUDICIAL
La noche del pasado sábado se tiñó de violencia en el municipio de El Hobo, al sur del departamento del Huila, cuando sujetos armados atentaron contra la vida de Víctor Arley Chavarro Moreno, actual presidente del Concejo Municipal. El hecho ocurrió en un establecimiento de su propiedad, donde el dirigente se encontraba departiendo con algunos amigos.
De acuerdo con las primeras versiones, hombres armados llegaron al lugar y, sin mediar palabra, abrieron fuego en repetidas ocasiones. Uno de los proyectiles impactó también a una mujer identificada como Elsa Marquínez, quien se encontraba en el sitio al momento del ataque. Según información preliminar, la mujer recibió un disparo en el rostro y fue trasladada de urgencia a un centro asistencial junto al concejal.

Fuera de peligro
Las autoridades locales confirmaron que ambas víctimas fueron remitidas a un hospital cercano, donde reciben atención médica. Aunque aún no se conoce un parte oficial sobre su estado de salud, fuentes cercanas señalaron que Chavarro estaría fuera de peligro, mientras la ciudadana herida permanece bajo observación médica debido a la gravedad de su lesión.
La noticia generó conmoción en la comunidad y en los sectores políticos del Huila, donde el atentado ha sido interpretado como un nuevo golpe contra los líderes locales, quienes en los últimos meses han sido objeto de amenazas y ataques en diferentes municipios del departamento.
Tras conocerse el atentado, la Policía y el Ejército Nacional desplegaron un amplio operativo en el casco urbano y en las vías rurales de El Hobo con el fin de dar con los responsables. Los uniformados realizan patrullajes y verifican cámaras de seguridad del sector para establecer la ruta de escape de los atacantes, así como el posible móvil detrás del crimen.
En investigación
El comandante de la Policía del Huila informó que se adelantan las primeras investigaciones para esclarecer el tiempo, modo y lugar exactos en los que se perpetró el atentado. De igual manera, señaló que ya se recolectaron declaraciones de testigos presenciales y se trabaja en la identificación de los agresores.
Este ataque revive las alarmas en el municipio y en el departamento, especialmente porque no es la primera vez que Víctor Arley Chavarro es víctima de un atentado. En octubre de 2024, el dirigente político sobrevivió a un ataque armado cuando se movilizaba por una vía terciaria que conecta a Campoalegre con Yaguará. En aquella ocasión, recibió un disparo en el brazo, y los agresores lograron escapar.
Chavarro, reconocido por su liderazgo y cercanía con las comunidades rurales, ha sido un activo promotor de proyectos de desarrollo en la región y uno de los concejales más visibles del municipio. Por ello, su nombre ha estado en el radar político del Huila, lo que ha generado preocupación entre sus colegas y allegados ante los reiterados intentos de atentar contra su vida.

Violencia en el Huila
El atentado se suma a una serie de hechos violentos registrados en los últimos meses en el sur del Huila, donde las autoridades han reportado presencia de grupos armados ilegales que buscan controlar economías ilícitas y ejercer presión sobre dirigentes sociales y políticos. Estos sucesos han encendido nuevamente las alarmas sobre la seguridad de los funcionarios públicos y líderes comunales en el departamento.
Por ahora, el municipio de El Hobo permanece bajo estrictas medidas de seguridad, mientras los organismos de inteligencia trabajan para esclarecer los móviles del atentado y evitar que se repitan hechos de esta naturaleza.
La Gobernación del Huila y la Alcaldía municipal rechazaron el ataque y solicitaron a las autoridades nacionales reforzar los esquemas de protección para los representantes locales, reiterando que la violencia no puede ser un medio para silenciar las voces de quienes trabajan por sus comunidades.
El caso de Víctor Arley Chavarro vuelve a poner sobre la mesa la urgencia de fortalecer las políticas de seguridad y protección para los líderes políticos en las regiones, donde el ejercicio público sigue siendo una labor de alto riesgo.








