Los productores de este importante cereal en el Huila continúan trabajando a pérdidas. A esto se suma el mal tiempo que han enfrentado: las lluvias no han permitido que la producción prospere como se esperaba. Expresan que el Gobierno no les ha cumplido con todos los acuerdos pactados desde el pasado mes de marzo.
DIARIO DEL HUILA, CONTEXTO
Por: Leidy Catalina Durán Vásquez
Dignidad Arrocera Nacional y Dignidad Agropecuaria Colombiana anunciaron una jornada de movilización nacional de productores de arroz, como respuesta a lo que califican como una “grave crisis de precios” y al incumplimiento de los acuerdos pactados con el Gobierno Nacional.
Según el comunicado emitido por el gremio, la molestia se originó tras la decisión de la industria molinera —que concentra cerca del 80 % de la trilla y comercialización del cereal— de reducir el precio de compra del arroz paddy verde de $171.000 a $158.000 por carga de 125 kilos en la región del Ariari. Los arroceros temen que esta reducción se extienda a otras zonas del país a medida que avanza la cosecha, que comenzó este 1 de julio.
En su pronunciamiento, Dignidad Arrocera recordó que en marzo y abril de este año se levantó un paro arrocero tras alcanzar compromisos con el Gobierno que, según afirman, no se han cumplido o se han implementado parcialmente. La organización sostiene que la reducción de precios pone en riesgo la sostenibilidad del cultivo de arroz, afecta el patrimonio de miles de familias campesinas y compromete la soberanía alimentaria del país.
“Los acuerdos de precios no buscan excluir a ningún sector de su tasa de ganancia, pero sí garantizar que los productores no operen con pérdidas”, señalaron, al tiempo que exigieron la intervención inmediata del Gobierno en el mercado del arroz para evitar una “quiebra económica segura” de los productores nacionales.
En ese sentido, el gremio pidió revisar los tratados de libre comercio y reforzar el control al contrabando, que también afecta la comercialización del arroz colombiano. A la espera de los resultados de la reunión extraordinaria del Consejo Nacional del Arroz —convocada por el Ministerio de Agricultura—, los productores advirtieron que, de no tomarse medidas concretas, la movilización se llevará a cabo como un acto de resistencia civil.
“Antes de permitir que se sepulte la producción nacional de arroz y se reemplace por importaciones, estamos dispuestos a levantar la resistencia en las carreteras del país”, concluye el comunicado.
La protesta anunciada para el 7 de julio busca visibilizar la situación del sector arrocero, exigir un reajuste en el precio interno del grano y promover decisiones estructurales que garanticen la sostenibilidad del agro colombiano.
En el Huila, el panorama no es distinto: el sector arrocero enfrenta desafíos significativos, incluyendo precios bajos, deudas impagas y condiciones climáticas adversas. La falta de cumplimiento de los acuerdos por parte del Gobierno agrava aún más la situación, poniendo en riesgo la estabilidad económica de miles de productores y sus familias.
“Nuevamente, este 7 de julio el sector arrocero en el país se moviliza por las indiferencias entre un gran acuerdo que no se ha podido alcanzar, al no fijarse un precio que genere ganancias al agricultor. La industria ha sido indolente, bajó 15.000 pesos más en esta semana el precio del arroz, y hoy primero de julio lo volvió a bajar. Esto es un precio de ruina”, indicó Martín Vargas, líder del sector arrocero.

El gremio venía con un precio de $185.000 por carga de 125 kg, y hoy les están pagando $170.000, un valor ruinoso que ni siquiera cubre los costos de producción.
“¿Cómo va a surgir el sector arrocero en el país con esta injusticia que hace la industria al bajar estos precios tan indiscriminadamente? No han querido llegar a un acuerdo para tener un punto de equilibrio, donde todos los eslabones de la cadena tengamos una ganancia, especialmente nosotros, los agricultores, el eslabón más débil. Así mismo, queremos que en las tiendas y supermercados, el precio final favorezca también a los agricultores pequeños y medianos, con márgenes justos de ganancia. Por ese motivo, nos vamos nuevamente a un paro nacional arrocero”, expresó Vargas.
Uno de los puntos más críticos es el incumplimiento relacionado con el apoyo a la comercialización del arroz. El Gobierno había acordado la expedición de una resolución que permitiría a los arroceros acceder a incentivos clave para mejorar su situación económica. Sin embargo, hasta la fecha, la resolución no ha sido emitida, lo que está afectando gravemente a los productores.
Otra falencia: contrabando y comercio exterior
Además de los problemas internos, el sector arrocero enfrenta graves desafíos con el contrabando y el comercio exterior, los cuales siguen sin ser abordados de manera efectiva por las autoridades competentes. Estos temas no solo afectan la competitividad de los productores colombianos, sino que también agravan aún más la crisis del sector.
Acuerdos pactados
Para el mes de marzo, cuando realizaron un paro nacional que duró aproximadamente 10 días, se lograron acuerdos importantes. Según explicó Geidy Ortega, viceministra de Asuntos Agropecuarios en ese momento, el Gobierno Nacional se comprometió a crear una bolsa con $21.930 millones para los productores de arroz.
De este total, $8.747 millones estarían disponibles para apoyar a los pequeños productores en la comercialización del cereal, con un techo aproximado de 72.896 toneladas.
También se destinarían $12.082 millones para atender a los medianos productores de arroz, hasta por un techo de 154.954 toneladas.
La viceministra Geidy Ortega aseguró que se daría prioridad a los pequeños productores con un aporte de $15.000 por carga, mientras que para los medianos serían $9.750 por carga.
El alto costo de los insumos, el cambio climático y la poca ayuda de los gobiernos son las principales causas que han llevado a muchos productores a alternar los cultivos con otros productos.
Desde el Ministerio de Agricultura se dio a conocer que la estrategia de comercialización incluye la apertura de mercados en el exterior con apoyo del Ministerio de Comercio, ProColombia y la Agencia de Desarrollo Rural. Se espera que buena parte de los inventarios actuales lleguen a mercados venezolanos.
Adicional a ello, está el fortalecimiento de las compras públicas locales, para que los productores arroceros oferten sus cargas a entidades del sector nacional que requieran el cereal para la atención en sus distintos programas sociales.
Este componente ofrece, además, el apoyo de maquila para 3.000 toneladas cosechadas por pequeños y medianos productores que hayan cumplido todo el proceso de caracterización promovido y socializado por MinAgricultura en los diálogos arroceros por la Reforma Agraria en el centro del país.
De todos estos acuerdos, hasta el momento ninguno ha sido cumplido por parte del Gobierno Nacional. Por tal motivo, los arroceros decidieron no esperar más y manifestarse nuevamente en las vías del Huila.

Principales necesidades
- Precios justos y competitivos: Los arroceros requieren precios que cubran sus costos de producción y les permitan obtener una rentabilidad adecuada.
- Apoyo gubernamental efectivo: Solicitan políticas públicas que respalden la comercialización del arroz, como subsidios o mecanismos de estabilización de precios.
- Cumplimiento de acuerdos: Exigen que el Gobierno Nacional honre los compromisos adquiridos en acuerdos previos, como el firmado en marzo de 2025, que aún no ha sido implementado en su totalidad.
- Condiciones de producción sostenibles: Necesitan acceso a insumos de calidad, financiamiento accesible y asistencia técnica para mejorar la productividad y sostenibilidad de sus cultivos.
- Controles efectivos contra el contrabando de arroz.
- Investigación sobre posibles infracciones de la industria molinera.
- Solución a las deudas de los agricultores con la banca y el agrocomercio.
- Revisión y ajuste en el costo y calidad de la semilla certificada.
- La incertidumbre persiste mientras los arroceros siguen firmes en su lucha hasta tener soluciones concretas y prontas del Gobierno Nacional.
¿Habrá bloqueados?
El arrocero también dio a conocer que se evalúan los puntos de bloqueo para el próximo 7 de julio, se estima que sobre la Ruta 45 en el municipio de Campoalegre, otro sobre el sector de la rotonda entre Palermo y Yaguará, y analizan si llegar hasta el peaje en Neiva para hacer presencia y buscar ser escuchados y ayudados por parte del Estado.








