La creciente amenaza de los grupos disidentes no solo afecta al Tolima, sino que también ha extendido su accionar delictivo al Huila. Alias “May”, un peligroso cabecilla, ha consolidado su presencia en ambos departamentos, moviéndose con impunidad entre territorios y sembrando el terror entre campesinos y comerciantes. Ante esta crisis de seguridad, la gobernadora Adriana Magali Matiz exige respuestas contundentes de las autoridades para frenar la ola de extorsiones y violencia que azota la región.
DIARIO DEL HUILA, PRIMER PLANO
En un reciente Consejo de Seguridad, la gobernadora del Tolima, Adriana Magali Matiz, demandó de las autoridades acciones más contundentes para neutralizar a los cabecillas de las disidencias en la región, en especial a alias “Fabián” y alias “May”. La mandataria solicitó un aumento en la recompensa por alias “Fabián” hasta los 100 millones de pesos y exigió mayor presencia en el territorio por parte de la cúpula de la Sexta Brigada y su comandante.
Extorsión y violencia en aumento
Durante el Consejo de Seguridad se analizó el incremento de las extorsiones a familias campesinas y comerciantes en los municipios del sur del Tolima, así como los hechos de intolerancia que dejaron un saldo de tres personas muertas en Ibagué durante el fin de semana. La preocupación por el recrudecimiento de la violencia y la inseguridad ha llevado a las autoridades a replantear sus estrategias para combatir estos flagelos.
En su intervención, la gobernadora Matiz enfatizó en la necesidad de intensificar las operaciones de inteligencia para ubicar y capturar a estos criminales, quienes han fortalecido sus actividades delictivas en la región. Particularmente, destacó el caso de alias “May”, quien, pese a operar principalmente en el departamento del Huila, ha ampliado su radio de acción hacia Planadas, Tolima, afectando gravemente a la comunidad local.
“Alias May ha venido realizando extorsiones de manera descarada en el sur del departamento del Tolima. La comunidad nos envía todos los requerimientos y reportes sobre su accionar. El pasado 19 de marzo realizó citaciones en Planadas, donde ha estado extorsionando a campesinos, caficultores y funcionarios públicos. Debemos prestarle especial atención a este caso, ya que la recompensa ofrecida hasta ahora no ha generado los resultados esperados”, manifestó Matiz.
La mandataria también subrayó que alias “May” no solo delinque en el Tolima, sino que ha consolidado su presencia criminal en el departamento del Huila, moviéndose entre ambos territorios con facilidad para evadir a las autoridades. “Alias May opera con total descaro en la región, cruzando entre Tolima y Huila para continuar con sus extorsiones sin que hasta ahora se haya logrado una acción efectiva para frenarlo”, advirtió la gobernadora.
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Articulación de esfuerzos y estrategias
Matiz demandó de las autoridades una articulación más efectiva para agilizar las operaciones contra estos cabecillas y el fortalecimiento de las estrategias de seguridad en la región. Asimismo, llamó la atención sobre la falta de avances en la captura de los criminales incluidos en el cartel de los más buscados, que sigue conformado por los mismos 17 delincuentes identificados el año pasado.
“Tenemos que definir qué acciones vamos a implementar para hacer un control territorial efectivo. Necesitamos que tanto la Policía como el Ejército fortalezcan sus estrategias para avanzar en la lucha contra estos grupos delictivos. La seguridad del departamento no puede verse comprometida por la falta de acción”, enfatizó.
El secretario de Seguridad, Convivencia Ciudadana y Orden Público, Alfredo Bocanegra, también se pronunció sobre la situación alarmante que se vive en municipios como Prado y Dolores, donde los criminales han establecido puntos de cobro de extorsiones sin enfrentar mayores represalias por parte de las fuerzas de seguridad.
“Nos preocupa mucho la situación en Prado y Dolores, especialmente en el sector Las Vegas, donde hay presencia de entre 8 y 15 uniformados irregulares fuertemente armados. Se han registrado casos en los que los comerciantes y empresarios son obligados a pagar extorsiones a escasas cuadras de una base del Ejército sin que haya respuesta de las autoridades”, alertó Bocanegra.
Recompensas y operativos en la mira
La gobernadora insistió en la necesidad de incrementar las recompensas para incentivar la colaboración de la ciudadanía en la captura de los cabecillas criminales. Particularmente, propuso que la recompensa por alias “Fabián” aumente hasta los 100 millones de pesos, con el fin de motivar a posibles informantes a suministrar datos clave para su localización.
Por otro lado, la mandataria instó a las autoridades a mejorar los operativos de inteligencia y respuesta, señalando que la falta de resultados concretos refleja la necesidad de ajustes en las estrategias implementadas hasta el momento. “No podemos seguir permitiendo que alias “May” y alias “Fabián” continúen operando con impunidad. Debemos actuar con determinación para garantizar la seguridad de nuestra gente”, concluyó.
La gobernadora Adriana Magali Matiz ha dejado claro su compromiso con la seguridad del Tolima y su intención de presionar a las autoridades para que tomen medidas más contundentes contra los cabecillas de las disidencias. El llamado de atención busca que tanto la Policía como el Ejército refuercen sus estrategias para capturar a estos delincuentes y devolver la tranquilidad a los habitantes del sur del departamento.
Ante este panorama, la comunidad y las fuerzas vivas del Tolima están a la expectativa de cómo evolucionará la situación en las próximas semanas. Las autoridades tienen el reto de demostrar que la lucha contra la criminalidad es una prioridad real y no solo un discurso de coyuntura. Se espera que en los próximos informes de seguridad se reporten avances significativos en la desarticulación de estas estructuras criminales y en la captura de sus cabecillas.
El llamado de la mandataria no solo es una exigencia a las autoridades locales y nacionales, sino también un mensaje a la ciudadanía para que denuncie cualquier hecho que ponga en riesgo la seguridad del departamento. Sin la colaboración de la comunidad, las operaciones pueden verse limitadas, por lo que la participación ciudadana es clave en este proceso de fortalecimiento de la seguridad en el Tolima y Huila.
