En Neiva se cuentan por lo menos diez lugares que han sido utilizados por los malos ciudadanos para el depósito ilegal de residuos sólidos o escombros. Actualmente, a la ciudad remover más de 870 metros cúbicos de estos desechos le cuesta cerca de 100 millones de pesos.
DIARIO DEL HUILA, NEIVA
Por: Francy Villarreal Ruiz
El concejal de Neiva, Juan Diego Amaya Palencia, denunció recientemente una latente problemática ambiental en la ciudad: el aumento de las escombreras ilegales. De acuerdo con el cabildante, en un recorrido realizado por diferentes zonas, pudo evidenciar que en la capital del Huila existen por lo menos diez escombreras que funcionan en espacio público, ubicadas en las zonas norte, oriente y sur de la ciudad.
Según el concejal, en la Comuna 6, al sur de Neiva, muy cerca del Jardín Botánico, se reportan toneladas de escombros esparcidos a ambos lados de la carretera. “Estuvimos en la Comuna 2, en el barrio Municipal, por la transversal Séptima que conecta la Calle 64 con la 26, donde, de nuevo, después de una limpieza realizada hace aproximadamente dos meses, el lugar está totalmente lleno de escombros. En el barrio Villa Nubia, en la salida hacia Fortalecillas, también encontramos residuos”, señaló.
Para el también ambientalista, la situación genera gran preocupación, ya que indudablemente afecta la imagen de la ciudad, más aún con la llegada de turistas por las festividades de San Juan y San Pedro. “Lo primero que van a ver los turistas que llegan en avión a Neiva son los escombros que están al lado de la pista de aterrizaje, donde, como mencioné, se encuentra el barrio Municipal”.
El problema de las escombreras debe ser abordado de manera seria y conjunta con las autoridades, con el fin de establecer alternativas más allá de que un ciudadano pague a un ‘zorrero’, una actividad prohibida en Neiva, o a personas que, mediante motocarros, cobran una tarifa baja por arrojar estos residuos en el espacio público.
La labor de Ciudad Limpia
A la problemática ambiental se suma el servicio y el costo del manejo de residuos por parte de Ciudad Limpia. Amaya Palencia explicó: “Llamamos a Ciudad Limpia haciéndonos pasar por un ciudadano que quiere cambiar el piso de su casa en la Comuna 6, y nos llevamos la sorpresa de que, por cada metro cúbico, después del segundo, el costo adicional es de 180.000 pesos. Es decir, que una volqueta podría costar entre ochocientos mil y un millón de pesos por disponer los residuos sólidos en el relleno sanitario autorizado”.
Frente a esto, solicitó a la empresa la posibilidad de flexibilizar los costos de disposición de escombros en el relleno sanitario, como una alternativa para evitar que los residuos terminen en espacios públicos como el Jardín Botánico, una zona ambiental protegida.
El tema a debate en el Concejo
“Creo que es importante hacer un debate de control político, sentarnos a analizar con Las Ceibas EPN, Ciudad Limpia, la Secretaría de Medio Ambiente y el Concejo de Neiva qué se puede hacer, porque realmente Neiva es una ciudad sucia”, expresó el cabildante.
Neiva se ha convertido en una ciudad de escombreras, pues los malos ciudadanos desechan residuos incluso en los separadores viales de las avenidas principales. Este tipo de materiales se pueden observar en sectores como Los Andes, la vía hacia el corregimiento de Fortalecillas, la carretera a Galindo, la salida hacia el sur en el sector del colegio Salesiano, y a la orilla del río del Oro.
“Todo está lleno de basura, y la presentación de la ciudad es muy fea. Y no lo crean, existen estudios muy serios que establecen la relación entre una ciudad sucia, una ciudad insegura y una ciudad con poca cultura ciudadana”, añadió Amaya.
¿Un tema de cultura ciudadana?
En un contexto como el de Neiva, es difícil disponer de la fuerza policial necesaria para vigilar estos casos, que además transgreden el Código de Policía. No puede pasarse por alto el esfuerzo que se ha hecho por retirar de circulación los vehículos de tracción animal en la ciudad.
Desde hace tres administraciones se ha intentado implementar un centro de bienestar animal como alternativa para que la autoridad actúe frente a estos casos. Sin embargo, en el año 2025, el centro de protección y bienestar animal aún no existe en la capital del Huila, lo que dificulta esta labor.
“Hemos intentado, de una u otra manera, hacer seguimiento a quienes comúnmente se conocen como zorreros; pero, aun así, incluso en volquetas arrojan residuos, y las motos con parrilla trasera también lo hacen. La verdad, la cultura de muchos neivanos pareciera ir en contravía de la ciudad”, acotó el ambientalista.
Las escombreras en Neiva representan un problema complejo con el que se ha luchado desde varias administraciones. Está claro que debe trabajarse de manera transversal con las autoridades e instituciones como la Dirección de Justicia, la Policía, la Secretaría de Medio Ambiente, entre otros entes correspondientes.
“Hay que buscar alternativas que permitan a los ciudadanos disponer formalmente sus residuos en lugares establecidos. Además, se deben implementar acciones de concienciación y cultura ciudadana para que Neiva no desmejore su imagen”, concluyó el concejal.
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¿Qué dice la Secretaría de Medio Ambiente?
Frente a la situación, Diario del Huila habló con Andrés Felipe Buitrago Vargas, secretario de Desarrollo Agropecuario y Medio Ambiente del municipio de Neiva, quien se refirió al aumento de escombreras ilegales.
“El tema de las escombreras es una problemática de ciudad, relacionada directamente con el amor por Neiva. Realmente es un tema de conciencia ciudadana. Aquí hay una gran dificultad, y es que a muchos les da miedo gestionar permisos, cumplir con la normatividad, tener documentos en regla y hacer la correcta disposición de residuos. Entonces, optan por acudir a los mal llamados ‘zorreros’, cocheros o volquetas que realizan esta disposición de manera inadecuada”, señaló el secretario.
Según Buitrago, el municipio cuenta hoy con un relleno sanitario autorizado como punto de disposición final. Sin embargo, los pequeños generadores de residuos actúan directamente desde la comunidad.
“Tenemos un ejemplo en la zona aledaña al aeropuerto. Lo hemos limpiado más de dos o tres veces y seguimos haciéndolo. Hemos identificado cerca de 870 metros cúbicos de residuos sólidos en distintos puntos. ¿Y quién los genera? La misma ciudadanía. Son los mismos habitantes quienes disponen esos desechos en dichos sitios”, afirmó el vocero de la administración.
Acciones y soluciones
Para las autoridades, lo ideal sería que, como ciudadanos que aman a Neiva, se hiciera una disposición adecuada de los residuos, solicitando las licencias y permisos pertinentes. No obstante, se trata de un tema de conciencia ciudadana que ha generado un problema económico que el municipio no está en capacidad de asumir.
“Si llevamos esta problemática al plano de los recursos, puedo decir que nosotros, como Secretaría de Desarrollo Agropecuario y Medio Ambiente, no contamos con la maquinaria necesaria para hacer esas intervenciones. Pero si hablamos de costos, una jornada con volquetas, pajaritas, motoniveladoras, más el operador y el desgaste administrativo, puede estar entre tres y cinco millones de pesos diarios por atender un solo punto, y sabemos que no podemos atenderlos todos”, enfatizó Buitrago.
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Las escombreras
Según el reporte de la Administración Municipal, se han identificado varios puntos críticos que funcionan como escombreras ilegales. Estas se ubican al sur de Neiva, junto al edificio ProHuila, donde ya se realizó una recolección de más de 300 metros cúbicos de material. Sin embargo, la disposición ilegal continúa.
“No es que la administración no trabaje frente a este tema con los pequeños generadores y con las personas que hacen una mala disposición de residuos. Venimos actuando y tenemos evidencias de que hemos limpiado estos puntos. Sin embargo, sigue siendo un problema de conciencia ciudadana”, agregó el secretario.
La autoridad ambiental reiteró que Neiva cuenta con una sola escombrera autorizada. Aun así, se reportan varios puntos críticos con disposición irregular de residuos. “No podemos ocultar esta problemática. Es creciente. Aunque la seguimos atacando limpiando los lugares, el problema se vuelve cíclico. Necesitamos el apoyo de la ciudadanía”, subrayó Buitrago.
Comparendos ambientales
Se aclaró que la Secretaría de Desarrollo Agropecuario y Medio Ambiente no tiene funciones policivas ni sancionatorias para imponer medidas a quienes incurren en estas acciones perjudiciales para la ciudad.
“No somos autoridad ambiental. Esa función le corresponde a la CAM, que ejerce las acciones sancionatorias en materia ambiental, y la Policía, que a través de la Ley 1801 tiene esas facultades”, aclaró el titular de la cartera.
A pesar de que se han aplicado numerosos comparendos a personas que realizan estas disposiciones irregulares, está claro que la medida no ha generado el impacto suficiente. La capacidad sancionatoria se ha visto limitada.
“Seguimos trabajando y atacando estos puntos críticos, pero realizar una sola limpieza de los 870 metros cúbicos de escombros le cuesta a la ciudad más de 100 millones de pesos. Y a esto se suma la pregunta: ¿cada cuánto vamos a tener que hacerlo?”, concluyó Buitrago.
