La Procuraduría General de la Nación inició una indagación previa contra el brigadier general del Ejército Juan Miguel Huertas Herrera y el funcionario de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI) Wílmar Mejía, tras conocerse versiones que los vincularían con integrantes del Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc.
Según la Sala Disciplinaria de Instrucción, información difundida por distintos medios sugiere que ambos servidores públicos habrían filtrado datos clasificados relacionados con movimientos de tropas y operaciones militares previstas en regiones como Antioquia, Catatumbo y el sur de Bolívar. Estos reportes motivaron la apertura formal de la actuación disciplinaria.
Verificación de presunto apoyo logístico a estructuras armadas
La Procuraduría también investigará si Huertas y Mejía habrían brindado orientación o apoyo a miembros de estas organizaciones armadas para la creación de empresas de seguridad privada. Estas, en teoría, les permitirían legalizar el porte de armas y prepararse ante un posible cierre de diálogos con el Gobierno Nacional.
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Objetivo de la indagación
La apertura de la indagación busca establecer:
- Si la conducta efectivamente ocurrió
- La participación de los dos funcionarios
- Si actuaron bajo alguna causal de exclusión de responsabilidad
Para ello, el ente de control decretó la práctica de múltiples pruebas que permitan esclarecer los hechos y avanzar en la determinación de posibles faltas disciplinarias.
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