Nuevamente el país se encuentra en máxima alerta por el regreso de la oleada invernal durante los dos últimos dos meses del presente año, lo cual obliga a todos los Comités Locales de la Gestión del Riego a estructurar planes de contingencia para atender las diferentes emergencias, por la alta intensidad de lluvias que están generando afectaciones a las familias residentes y a la dinámica económica de estas localidades. Durante las últimas dos semanas, se ha arreciado la oleada invernal en algunas regiones del país, generando daños a la infraestructura productiva, donde ocurren estas emergencias. A través de los medios de comunicación y redes sociales se están difundiendo las dantescas imágenes de las inundaciones provocadas por el aumento de los caudales de los afluentes de los principales ríos que atraviesan el territorio colombiano. Las remociones en masa están afectando carreteras, provocando taponamientos y bloqueos en el tránsito automotor. Los daños económicos son cuantiosos en los sectores que son los que contribuyen a dinamizar las economías regionales y locales.
Igualmente, esta región del continente americano, empiezan a sufrir los reiterados huracanes que afectan a los países que tienen sus costas en el océano Atlántico y que Colombia, empieza a sufrir los coletazos de estos dantescos fenómenos climatológicos. Tal es el caso del Huracán Melissa que actualmente se ha convertido en categoría 5 y que está actualmente afectando las islas de Jamaica. República Dominicana y que en las próximas llegará a Cuba. En Colombia, los alcaldes y los Comités locales de Gestión del Riesgo claman ayudas a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, cuya entidad ha sido bastante cuestionada por los grandes escándalos de corrupción, ya conocidos por toda la opinión pública nacional e internacional. Los dineros asignados para estos fines, han sido hurtados para comprar la conciencia de los congresistas para que les voten las reformas presentadas por el ejecutivo. Inclusive varios funcionarios y algunos integrantes del legislativo ya se encuentran en la cárcel y otros están siendo investigados por los organismos de control.
Por tal motivo, la mitad de los municipios del país están siendo afectados por este crudo invierno y que se encuentran inermes y desamparados por los motivos anteriormente enunciados. No existen los recursos para atender estas emergencias, porque se han hurtado la plata, con la anuencia del gobierno nacional, así no lo quieran aceptar los sectores políticos afectos al ejecutivo. Ahí están las investigaciones andando. Y como si fuera poco, la profunda crisis financiera que está afectando el funcionamiento normal del Estado, ha obligado a disminuirle el presupuesto a la UNGRD para la presente vigencia en más de un 60%, lo cual, les ha impedido prestar el apoyo oportuno a los entes territoriales. Mientras el jefe de Estado con una amplia fronda burocrática se encuentra disfrutando su viaje No. 73 por el medio Oriente.







